Uno de cada cinco argentinos tiene alergia a un alimento o a un agente de contaminación ambiental, reveló hoy el informe preliminar del XXI Congreso Mundial de Alergia que se realizará el mes que viene en la ciudad de Buenos Aires.

Carlos Baena Cagnani, presidente del comité organizador de ese encuentro médico que se hará del 6 al 10 de diciembre, alertó que "en los últimos años, cada vez más personas presentan síntomas de alergia". El especialista estimó que "eso obedece a una conjunción de factores, entre los que se destacan la dieta occidental y la contaminación del medio ambiente".

"Se puede considerar a la alergia como epidemia en el sentido que afecta llamativamente cada vez a más población, sin ser una enfermedad contagiosa y de la cual sería interesante conocer sus causas de crecimiento", indicó.

Las alergias se caracterizan por una respuesta inmunitaria exagerada ante el contacto con determinadas sustancias denominadas alergenos, lo que se traduce, entre otros síntomas, en picazón, estornudos, secreción nasal, lagrimeo, cólicos estomacales, vómitos, sibilancias y dificultad para respirar.

El estudio que manejan los organizadores del congreso señala que cerca de uno de cada cinco argentinos tiene rinoconjuntivitis, es decir, alergia a nivel respiratorio y ocular, y es similar la cantidad de afectados por alimentos. En tanto que en el caso del asma bronquial, el mayor porcentaje de ese cuadro clínico en la región tiene un origen alérgico, con uno de cada cuatro afecados con síntomas severos. En Europa, uno de cada cuatro niños es alérgico, mientras que en los países industrializados se estima que entre un 25 y 40% de la población sufre de rinitis alérgica y un 20% asma alérgico.

Baena Cagnani indicó que "la Organización Mundial de la Salud (OMS) destacó la importancia de esas enfermedades, que pese a que pueden parecer triviales afectan a un creciente número de la población". "Esos trastornos -dijo- causan una disminución del rendimiento rutinario del paciente y detrimento de su calidad de vida, además de una predisposición mayor a otras enfermedades como la sinusitis, otitis o empeoramiento del asma".

Los factores que predisponen a sufrir alergia van desde los antecedentes familiares y una condición genética para reaccionar a un alergeno común del medio ambiente, hasta la dieta occidental y la exposición a la creciente contaminación ambiental. Dentro de los contaminantes ambientales intra-domiciliarios, el más frecuente es el humo del cigarrillo.

Maximiliano Gómez, miembro del comité organizador del congreso, sostuvo que "es común en los alérgicos la automedicación y es particularmente frecuente cuando las afecciones alérgicas son intermitentes o leves".

Pero insistió en que "el médico clínico es el que puede manejar los síntomas más sencillos; la consulta a un especialista en alergia es fundamental cuando el problema se repite o cuando habiendo realizado un tratamiento indicado por algún profesional, no se logra controlar el cuadro".

Si bien es imposible erradicar la predisposición a sufrir de algún tipo de alergia, en la actualidad se cuenta con múltiples herramientas terapéuticas que permiten un manejo satisfactorio de los síntomas. Existen casos en los cuales eliminando el factor desencadenante de la alergia se resuelve el problema, como puede ocurrir en las situaciones de alergia a un medicamento o alimento, pero por lo general eso no es lo más frecuente.

Gómez comentó que "en los casos reincidentes hay tratamientos controladores muy eficaces y con escasos efectos secundarios, como antialérgicos y vacunas específicas para los alergenos".

Télam