En un intenso y emotivo partido, Rosario Central y Lanús empataron anoche sin goles en el Gigante de Arroyito. Fue el cierre de la 14º fecha del Apertura. Aunque buscó siempre y no lo pudo ganar, Central llegará en buena forma al clásico con Newell´s.
Los esquemas tácticos que ambos entrenadores pensaron fueron idénticos: 4-4-2. Por eso los primeros minutos fueron de escasa acción, ya que cada uno se dedicó a controlar al otro.
Fue Central el que intentó romper el bloque táctico. Al principio por izquierda. Pero lo mejor del "canaya" apareció cuando el juego se trasladó a la derecha: Gómez se soltó y comenzó a jugar. Primero desbordando por la banda y luego tirándose al medio.
Las dos acciones más clara fueron del local y por la derecha. A los 25 minutos, Castillejos remató afuera una pelota que dominó en el borde del área chica y a los 36, otra vez Castillejos, pero esta vez su cabezazo dio en el travesaño.
Biglieri tuvo una muy clara a los seis minutos, tras aprovechar una falla de Burdisso, pero Broun lo ahogó y le tapó la definición. A partir de entonces, Lanús le quitó la pelota al local y consiguió un protagonismo que no había tenido en el primer tiempo. El partido se hizo de ida y vuelta porque en cada réplica las defensas quedaban descompensadas.
A los 22 minutos, dos veces Central tuvo el gol: primero con un cabezazo de Núñez y después con un remate de Ambrossi, que Marchesín sacó al córner. En la contra, Salcedo la mandó por arriba del travesaño. Tres minutos después, el árbitro Pitana anuló un gol de Burdisso por presunto offside. Central recuperó el control de la pelota, pero no supo vulnerar a un efectivo Marchesín.
