TEGUCIGALPA (AP). -Los partidarios del derrocado presidente Manuel Zelaya intensificarán las movilizaciones a favor de una constituyente y del abstencionismo en las elecciones del 29 de noviembre, luego que su líder renunciara a ser restituido por considerar que el gobierno de facto violó el acuerdo firmado.
Aclararon que exigen el retorno de Zelaya al poder pero sin condiciones. "La lucha sigue después de las elecciones y es por la Constituyente, pues allí vamos a dejar plasmado lo que queremos. Y si los golpistas convocan a una Constituyente, desde ya la rechazamos porque no es del pueblo, es la de ellos´´, dijo en un comunicado el líder del Frente Nacional de la Resistencia contra el golpe de estado, Juan Barahona.
El Frente, integrado por organizaciones magisteriales, campesinas, trabajadoras y políticas , ha protagonizado desde el 28 de junio movilizaciones callejeras diarias demandando el retorno de Zelaya al poder. Zelaya impulsaba una reforma constitucional y fue sacado del poder por los militares cuando se disponía a organizar una consulta popular sobre sus intenciones reformistas. "La lucha es ahora para arrebatarle el poder a la oligarquía y dárselo a su verdadero dueño: el pueblo, porque no nos pueden seguir explotando´´, dijo el texto.
Las protestas de los partidarios han bajado de intensidad en las últimas semanas y se concentran en los predios del Congreso. Ese órgano del Estado tendrá que pronunciarse sobre la restitución de Zelaya, según lo pactado en el acuerdo Tegucigalpa-San José suscrito el 30 de octubre entre el gobernante de facto Roberto Micheletti y el depuesto mandatario. Pero Zelaya reiteró que para él, el acuerdo Tegucigalpa-San José ya nos es válido por el incumplimiento en su restitución una fecha prudencial antes de las elecciones. "No quiero que mi voto sirva para limpiarle la cara al los golpistas´´, dijo.
En cambio, el gobierno de facto ve en los comicios una salida a la crisis en que se sumergió el país desde que Zelaya fue derrocado e impulsa el proceso electoral.
