Siempre se premia a los primeros, a los ganadores, a los número 1. Hoy quiero rendirles homenaje a esas personas que nunca salen en los diarios ni en la tele; quiero hablar especialmente de alguien que para mí siempre fue una luchadora, una gran ganadora: mi señora madre. A los 38 años se quedó sola con cinco hijos para criar y educar y se convirtió en la mejor economista, la que mejor cosía ropa para sus hijos, destejía y tejía pulóveres para que no pasáramos frío y transformaba el mondongo en las mejores milanesas... y todo eso después de trabajar durante ocho o diez horas fuera de casa.

Nunca se quejó de la vida, y eso que motivos tenía y muchos, y siempre nos enseñó que desde el amor y el respeto se llega a ser gente de bien.

Ahora, con sus 76 años, sigue visitando a sus hijas, nietas y bisnietos con su andar despacito y sus consejos simples pero ¡con cuánta sabiduría!

Ella me enseñó su amor por la familia y por los hijos y yo con los míos trato de hacer lo mismo, ¡qué buena profesora tengo, la mejor!

Ya sé que van a pensar que es amor de hija, pero les puedo asegurar que es la mejor, es única, ¡es mi mamá!

Bueno, sólo quería contar lo orgullosa que estoy de ser su hija.

Matilde Zerega, DNI x34.495.13l - España