NEUQUÉN (AN).- La Legislatura provincial no podrá repetir este año la marca en cuanto a producción de leyes que presentaron a las autoridades de Cámara en el primer año de gestión, como si el buen trabajo se midiera en términos de cantidad. A un mes del cierre del período de sesiones ordinarias, el oficialismo se encamina a cerrar la reforma impositiva que presentó el gobierno como iniciativa más destacada, pero a su vez aplazó en la agenda numerosos compromisos asumidos en marzo que habían sido destacados como objetivos de la gestión.
La comprometida reforma del Consejo de la Magistratura es uno de los puntos que ni siquiera estuvieron cerca de ser debatidos en el año. A pesar de que son siete los proyectos presentados para modificar la ley reglamentaria, incluido el del MPN, el tema permanece dormido en la comisión de Asuntos Constitucionales y, si hubiera intenciones de aprobarla antes de fin de año, el debate debería ser feroz.
Otro asunto pendiente es la reglamentación de los institutos de participación ciudadana creados por la Constitución en 2006, como el Defensor del Pueblo y las leyes reglamentarias de consulta popular, audiencia pública, revocatoria de mandatos e iniciativa popular. Para el primero se conformó una comisión técnica de asesores, pero los avances han sido pobres. En el caso de las reglamentaciones que hacen a la participación ciudadana, para las que incluso hay proyectos de reglamentación de diputados de la anterior gestión, no son siquiera un tema de agenda.
Las sesiones ordinarias que restan en la Cámara para este año son cuatro, en dos pares. El primer par es el de la última semana de noviembre; y el segundo, en la primera quincena de diciembre. Las sesiones se plantean de a pares por el propio sistema de sanción de las leyes, con tratamientos en general y en particular que, por regla, deben realizarse en diferentes jornadas.
A fines de 2008, el Poder Ejecutivo envió proyectos de ley días después del cierre del período de sesiones ordinarias, que va del 1 de marzo al 15 de diciembre. Se destacaron dos iniciativas: la modificación de la ley de municipalidades y la que, en el mismo sentido, planteó cambios al régimen de las comisiones de fomento. Justamente, estos dos proyectos tampoco fueron discutidos. Es que desde el inicio de la gestión son un punto en el que hay desencuentros con la oposición, que reclama aumentar los porcentajes de coparticipación.
Sapag no presentó en término el presupuesto 2010, un límite que la Constitución provincial establece en el 30 de octubre. Salvo que lo presente en los próximos días y se debata en un trámite sumario, todas las señales indican que comenzará el tercer año de gestión firmando el decreto para prorrogar la estimación de gastos del 2009.