ALLEN (AA).- Desde la Secretaría de Gobierno de la municipalidad de Allen se le informó al presidente del Deliberante que un integrante del cuerpo de concejales presenta una situación de morosidad por deudas de tasas retributivas. El edil, en tanto, desestimó el informe y denunció que todo se trata de una persecución política para frenar su accionar legislativo.
El secretario de Gobierno, Eduardo Chavarría, explicó que mediante una ordenanza sancionada en el 2006 se autorizó por vía de excepción a la norma vigente a Raúl Bárcena (edil del partido Vecinal), a acceder a un plan de pago para cancelar una deuda por tasas, que finalmente no cumplió. "Después se hizo otra ordenanza especial para él y ahora que estamos haciendo intimaciones nos encontramos con que Bárcena no cumplió con sus obligaciones tributarias, a pesar de haber tenido más posibilidades de las que puede tener cualquier ciudadano".
Chavarría agregó que "cumpliendo con la responsabilidad de los actos de gobierno, nos pareció que debíamos informar la situación al Deliberante para ver si esto se encuadra en los artículos 14 y 15 de la Carta Orgánica Municipal". El funcionario municipal citó además el artículo 13 de la Carta, que indica que "no pueden ejercer la función municipal, los ciudadanos electos que sean deudores del Tesoro Municipal que intimados fehacientemente, no pagaren o no dieren cumplimiento a las obligaciones pactadas".
En tanto, Bárcena reconoció la deuda pero insistió en que está acogido a un plan de pago y argumentó que tiene toda la documentación para demostrar que Chavarría está equivocado. "Todo esto una persecución que nació a raíz del último pedido de informe que hice al Tribunal de Cuentas en donde pido que me expliquen por qué está demorada la terminación de la obra de ampliación del edificio del Deliberante".