VIEDMA (AV)- Algo más de 150 trabajadores estatales recorrieron ayer las calles céntricas de esta capital en una ruidosa marcha que unió los principales edificios públicos del Estado, en reclamo por la demora en la cancelación de los salarios de octubre por parte del gobierno Provincial.
Pacíficamente, los trabajadores afiliados a ATE, Unter y Sitrajur, se concentraron en la Plaza San Martín y luego partieron hacia el Poder Judicial, el Ministerio de Hacienda, el de Familia, la Legislatura, regresando luego a la sede central del Ejecutivo, donde se llevaron a cabo los discursos.
Luis Gianini, titular de la CTA, llamó a Saiz "a gobernar" y aclaró que eso "es pagar el salario el quinto día hábil. No basta con el cronograma".
Opinó que "gobernar es que el Ipross funcione y que tengamos una obra social todos los días y todas las coberturas. Es no tener uno de los peores salarios en todo el país, compuesto por un montón de cifras en negro".
Por otro lado, la marcha dejó en evidencias fuertes discrepancias entre los gremios estatales. Hugo Rojas, de ATE, afirmó, que "nosotros estamos acá como lo hicimos durante todo el año, mostrando una coherencia de lucha y organización".
Agregó que "los que no están deberían decir por qué no están. Creo que es porque son socios de este Gobierno y han sido impulsores de las ideas neoliberales que se han caído en todo el mundo. Han sido sostenedores de estas ideas y creo que por eso no están". Lo hizo en referencia al gremio de los legislativos, Viales, UPCN, Saneamiento, entre otros que ayer no se plegaron a la marcha.
Por su parte, el Sindicato de Trabajadores Judiciales de Río Negro repudió la "intención hostil y contraria a derecho que hacen las autoridades del Poder Judicial respecto a sus dependientes, al no arbitrar los medios para pagar los salarios en forma regular (convenio 95 OIT). Con claros manejos discrecionales, atenta seriamente con la pacificación del sector, y la continuidad de la mesa de diálogo".
Denunciaron que el STJ "mantiene claras actitudes anti-sindicales al pagarles el salario a pasantes dentro del Poder Judicial (con la intención de romper con nuestros legítimos derechos al reclamar el salario sustento de los trabajadores)".