CIPOLLETTI (AC)- "Hace tiempo se había apartado de la causa porque desde el juicio no había hecho prácticamente nada", opinó ayer Ulises González sobre la decisión del juez Pablo Iribarren de "dar un paso al costado" en la investigación del triple crimen y aceptar la recusación.

Ofelia Mosconi de Villar, al igual que González, se enteró por la prensa la resolución del magistrado. Lo primero que se preguntó es si iba a seguir ejerciendo como juez. "No nos deja mucha garantía", opinó la mamá de Verónica.

Iribarren tomó la decisión luego de que González lo recusara por advertir que había perdido "la compostura de imparcialidad necesaria para el cargo". El juez Emilio Stadler quedaría al frente de la causa residual, que se inició cuando se elevó a juicio el expediente con dos imputados, de los cuales sólo uno, Claudio Kielmasz, quedó con condena firme.

Ayer se cumplieron 12 años de la desaparición de María Emilia y Paula González y Verónica Villar. Poco después de las 11, el Movimiento Social Dignidad realizó una manifestación frente al edificio de la Justicia Penal en Cipolletti, donde hizo la entrega del "Perejil de Oro 2009". Unos 35 manifestantes -a los que se sumó la mamá de Verónica- se ubicaron sobre la calle España con carteles, máscaras y tamboriles. La policía rodeó las inmediaciones y se instaló en la puerta de acceso, impidiendo la entrada al grupo. Sí dejó que una representante de la organización y Ofelia, llevaran el "premio" junto a una nota dirigida a los "Señores del Poder Judicial de Río Negro". Querían entregársela al ex fiscal de la causa, Alvaro Meynet (ahora camarista) pero como les dijeron que no estaba, la recibieron empleadas.

"Han transcurrido doce años desde que sucediera en Cipolletti uno de los crímenes más atroces de su historia, el triple crimen. (...) Como para hacer una muestra mafiosa de poder, que nos duela aún más, a este crimen, le siguieron otros catorce. Desde entonces la justicia, haciendo honor a una noble planta, sólo ha encarcelado a perejiles", dice el escrito.

Agregaron que por ese motivo, "participando del profundo sentimiento que embarga a nuestra comunidad, entendemos que la justicia, con su destacado papel a favor de la impunidad, se ha hecho muy merecedora a un distinguido honor, como es el otorgamiento del premio: Perejil de Oro 2009".

Mañana la familia González hará una misa a las 19.30 en La Sagrada Familia y un acto a las 21 en la plaza San Martín.