NEUQUÉN (AN)- El contexto en el cual se produjo el ataque a balazos contra Pedro Alveal fue debatido en la sexta audiencia de juicio oral contra cuatro policías acusados de disparar contra el obrero ceramista.

El defensor de dos de los imputados, Marcelo Inaudi, lo señaló en forma explícita: "no podemos soslayar que hubo una serie de hechos que generaron un estado de ánimo en todos los que participaron de estos acontecimientos".

Lo dijo cuando estaba declarando el subcomisario Carlos Gutiérrez, quien durante la represión del 25 de noviembre de 2003 recibió un piedrazo en la rodilla, otro en el casco, sufrió una caída y fue despojado de su escopeta.

"Todos los policías se enteraron de que a Gutiérrez lo habían tirado al suelo, lo habían golpeado y le habían gatillado con su arma en la cabeza", remarcó Inaudi.

El fiscal Alfredo Velasco Copello se opuso a la línea de interrogatorio porque "se aparta del objeto procesal" que es el ataque a balazos contra Alveal. El tribunal rechazó la objeción.

Inaudi y su estrategia

Hace varias audiencias que Inaudi viene formulando preguntas sobre los ataques que sufrieron los policías durante los episodios del Ruca Che. Quizá su estrategia, que él no quiere anticipar, sea demostrar que la persecución de Alveal fue una especie de reacción ante el hostigamiento.

Por su lado, la querella también ha hecho hincapié en el contexto. Su testigo central de ayer fue el ex secretario general del gremio ceramista, Alejandro López, quien hizo una larga exposición sobre la represión policial de ese día.

"Los policías actuaron con una saña terrible, eso era tierra de nadie", expresó. También reivindicó la oposición de diversos sectores -entre ellos, los ceramistas- a la implementación de una tarjeta para desocupados. El intento por impedir el empadronamiento de beneficiarios fue lo que originó los incidentes.

Inaudi le preguntó si la lucha de la que hablaba "incluye proveer de bolitas de cerámica a los manifestantes para que le tiren a la policía". López respondió: "hemos visto que la policía las muestra como un arma terrorífica. No sé dónde las conseguirán. Nosotros sólo las usamos en la producción" en Zanon.

Agregó el dirigente que "más que gomeras, nosotros llevamos cámaras fotográficas y filmadoras. La experiencia nos dice que tenemos que registrar todo porque si no es muy difícil que se haga justicia".

El juicio seguirá hoy con más declaraciones. Entre ellas la del ex subjefe de la Policía, Juan Carlos Trepat, y de un suboficial que compromete a uno de los imputados pero que aún no pudo dar su testimonio porque se encuentra enfermo.

Mañana y pasado serán los alegatos.