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"El supuesto derecho de piso de un médico" | ||
Soy un neuquino que diariamente vive de cerca la injusticia con que se trata a un médico en su formación (en este caso mi pareja). Por tratarse ella de una médica residente, en primer lugar debe tolerar que por su trabajo se le retribuya un muy inferior sueldo por su labor, pasando casi toda la semana dentro de la institución; en segundo lugar, realizar las mismas o más labores que los médicos de planta permanente. Estos casos ocurren a diario en un "reconocido" centro de salud de esta ciudad, que sólo en Terapia Intensiva posee 23 camas, cosa que es ilógica de acuerdo con el personal que desempeña tareas y sólo tiene justificación si lo vemos desde el punto de vista de un "gran negocio", como es la salud hoy en día. A cada nuevo profesional de la medicina, como un supuesto "derecho de piso", se le sobreexige en la residencia (por ejemplo, Clínica Médica), con guardias día por medio, sueldos miserables y, además de ello, debe rendir la especialidad al final de la misma. Por todo esto no tienen amparo alguno ni donde asesorarse y pelear por sus derechos, los cuales se ven reducidos drásticamente en el sector privado. Tengamos en cuenta que sólo algunos pocos pueden terminar la carrera en tiempo y forma, debido a su esfuerzo y voluntad, y la mayoría de ellos invierten mucho más para recibirse. Hay un caso muy particular en este centro de salud e implica al jefe de la Residencia de Clínica Médica. El personaje en cuestión también es médico, ya que doctores hay pocos en Argentina, para ello hay que realizar en doctorado en una especialidad determinada. En fin, esta persona parece ser que se cree un dios en la tierra, una clase de superdotado de la medicina, creyendo que sólo su palabra vale, impartiendo malos tratos a los residentes, amenazando a los que se revelan o van en contra de sus intereses (o su negocio), mencionándoles que si dejan la residencia no van a trabajar en ningún otro lado o, lo que es peor, ¡les hará la vida imposible! Todo esto de acuerdo a sus "supuestas influencias" en el ámbito de la salud, según su supuesto reconocimiento en la profesión. La verdad, es más que lamentable la actitud de este hombre, ya que no tiene en cuenta que son verdaderos profesionales los perjudicados y la verdadera formación que necesitan realizar se ve negada por los intereses de "facturar" en favor de unos pocos. Un caso muy particular en el Policlínico es que es el único lugar en que se atiende a pacientes vip. O sea: una gran señal de discriminación al resto y sobre todo antiético e inmoral. Desde ya gracias por el espacio de expresión y que sepa la comunidad lo que pasa realmente. Sandro Salinas DNI 31.528.756 Neuquén | ||
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