ZAPALA (AZ).- Con críticas y acusaciones durísimas contra la Confederación Indígena Neuquina, se conformó ayer en esta ciudad la Asociación en Defensa de la Ley (Adeley). La convocatoria reunió a ganaderos, estancieros, productores rurales, vecinos e integrantes de comunidades mapuches que no responden a la conducción provincial.

El diputado nacional electo Horacio "Pechi" Quiroga y los legisladores provinciales Gastón Contardi y Horacio Rachid, respaldaron el encuentro con su presencia.

"Se dicen mapuches y están lucrando con nuestro esfuerzo pero ni siquiera conocen nuestra cultura" disparó Amaranto Aigo, de la comunidad Ruca Choroi, en alusión a las autoridades de la Confederación.

Aigo fue más allá y advirtió que "repudiamos las acciones que llevan adelante estas personas que no sabemos de donde aparecieron ni quien las eligió".

En el mismo tono se expresó Lucrecio Currumil, quien sostuvo que "en mi vida jamás ocurrió algo así, siempre tuvimos buena relación con los vecinos hasta que apareció esta gente y empezaron los problemas".

A su turno, el abogado Julián Alvarez enumeró los pilares sobre las cuales se sostendrá el funcionamiento de Adeley, una entidad que rechaza los cortes de ruta y las usurpaciones de campos, casas y propiedades privadas.

"Somos una asociación civil que, entre otros aspectos, defenderá a los argentinos que días atrás sufrimos un atentado cuando en una chicana burda se logró suspender un juicio de usurpación porque se pretendía utilizar un intérprete de nuestro propio idioma" sostuvo.

Además, acusó a la Confederación de "utilizar 3 millones de dólares que le entregó el gobierno para cometer todo tipo de ilícitos". Alvarez también aseguró que "estos pseudo dirigentes intentan formar una fábrica de talibanes con jóvenes limpios que habitan la cordillera".

El encuentro reunió a unas 150 personas, algo menos que el primero desarrollado en agosto en Aluminé,y sirvió de escenario para la exposición de representantes de la petrolera Piedra del Águila. "Somos una empresa nacional que venimos sufriendo ataques salvajes de parte de activistas mapuches desde el mismo momento en que intentamos poner en marcha la producción" aseguró Santiago Gastaldi, gerente de la firma. Explicó que uno de los hechos más grave se produjo cuando un grupo de 40 personas irrumpió en el campamento y agredió a los trabajadores.