El ex dictador y ex general Reynaldo Benito Bignone, junto a otros cinco ex militares y un ex comisario, empezaron hoy a ser juzgados en la localidad bonaerense de Florida oeste por algunos de los delitos contra la humanidad perpetrados en Campo de Mayo, en perjuicio de 56 personas que estuvieron allí recluidas de 1976 a 1978.
El proceso se lleva adelante en una sala de audiencias montada en la cancha de papi fútbol de la sociedad de fomento José Hernández, ubicada en la calle Hipólito Yrigoyen 4595, porque el Tribunal Oral Federal 1 (TOF1) de San Martín no tenía un lugar de dimensiones suficientes y le pidió uno a la municipalidad de Vicente López, que le facilitó ese escenario de una entidad barrial.
En el banquillo de los acusados se sentaron, en el siguiente orden, los ex generales Fernando Ezequiel Verplaetsen, 84 años, ex jefe de inteligencia de Campo de Mayo; Santiago Omar Riveros, 83, ex comandante de Institutos Militares; Bignone, 81, ex subcomandante de Institutos; Eugenio Guañabens Perelló, 83, ex Director de la Escuela "General Lemos". Seguidamente estuvieron Carlos Alberto Tepedino, jefe del batallón 601 de Inteligencia; Jorge Osvaldo García, ex Director de la Escuela de Infantería; y Germán Montenegro, 78, ex comisario de la localidad de Bella Vista.
A poco de iniciada la audiencia, sobre las 10 de la mañana, el enjuiciado Verplaetsen fue autorizado a retirarse porque padecía un cuadro de diarrea intestinal, según explicó la presidenta del TOF1, María Isabel Mollic.
El octavo acusado era el ex general Eduardo Alfredo Espósito, ex director de la Escuela de Ingenieros, pero el TOF1 ha suspendido la causa contra él porque padece una enfermedad mental y "no está en condiciones de ser sometido a juicio".
En el amplio sector asignado al público, hubo unas 200 personas, entre sobrevivientes, familiares de las víctimas, y militantes de las agrupaciones "Peronismo 26 de julio" y "Comandante de la Vida, Cacho Scarpati" -en referencia al jefe guerrillero que estuvo secuestrado en Campo de Mayo.
En el área asignada a las autoridades estuvieron presentes el ministro de Justicia, Jorge Alak; Judith Said, directora del Archivo Nacional de la Memoria; Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora y Lita Boitano, de la Familiares de Perseguidos por Razones Políticas.
La audiencia inaugural estuvo reservada a la lectura de los autos de elevación a juicio de las causas 2043, 2031, 2023, 2034, de la denominada "megacausa I Cuerpo de Ejército", elaborados en su momento por el fiscal de instrucción Jorge Sica, y se prevé que al finalizar -posiblemente mañana o el miércoles- el TOF1 disponga que los acusados presten declaración indagatoria. En la etapa de instrucción, ninguno de los acusados accedió a declarar y luego Bignone y otros pasaron a gozar de la detención domiciliaria.
Los seis militares y el policía comparecen en este juicio acusados como supuestos "autores mediatos" y "autores inmediatos", según cada caso, de allanamientos ilegales, tormentos, y privaciones ilegales de la libertad en 26 casos de delitos de lesa humanidad contra 56 víctimas en los centros clandestinos de detención "La Casita" y "El Campito", que funcionaron en Campo de Mayo.
Además de Mollic, el TOF1 está conformado por los jueces Héctor Sagretti, y Daniel Alberto Cisneros, con Lidia Soto como juez sustituto Lidia Soto. En la fiscalía actúan Juan Patricio Murray y José María De Luca. Los acusados son asistidos por los defensores oficiales Caros Palermo y Juan Tripaldi, mientras seis partes desempeñarán el papel de querellantes.
En este juicio, las audiencias se celebrarán los martes, miércoles y jueves, de 9.30 a 14.30, y se prevé que desfilen alrededor de 130 testigos, por lo que el proceso, se estima, podría extenderse hasta marzo de 2010.
DyN