ALLEN (AA).- Una vez más la violencia volvió a ser protagonista en el fútbol de la Liga Deportiva Confluencia. El partido que ayer jugaban Unión Alem Progresista y Los Unidos, terminó en una verdadera batalla campal en donde abundaron piñas y patadas. El árbitro debió suspender el encuentro y los jugadores de ambos equipos -chicos de entre 15 y 16 años- sufrieron traumatismos de distinta consideración por los enfrentamientos.
El repudiable hecho ocurrió en la cancha de los allenses, cuando los locales se enfrentaban ante los cipoleños, en sexta categoría. El clima en la cancha no era el mejor. El juez había tenido que mostrar algunas amarillas porque el juego era duro y el partido se disputaba con mucho contacto.
Cuando restaban tres minutos para el pitazo final, un defensor de Unión cometió una infracción y fue expulsado por el árbitro del encuentro. Y la violencia estalló en ese preciso momento porque el expulsado tomó la pelota con sus manos y se la arrojó al jugador de Los Unidos, que estaba tendido en el piso.
De acuerdo a lo informado por allegados al local, instantáneamente, todo el banco de suplentes del visitante invadió el campo y los chicos comenzaron a golpear al defensor de Unión. Así, el encuentro deportivo se convirtió en una riña salvaje de todos contra todos, en donde reinaron las trompadas, patadas y empujones.
En la cancha había dos efectivos policiales de la Unidad Sexta, que hicieron lo imposible para controlar la batahola. Uno de los uniformados relató que terminó tirado en piso tras recibir un empujón y además perdió su celular, que luego lo encontró en poder de uno de los integrantes de cuerpo técnico de Los Unidos.
La situación se agravó aún más cuando desde la tribuna visitante, jugadores y simpatizantes comenzaron a arrojar piedras hacia el campo de juego.
Todo terminó con la suspensión del partido ya que el árbitro y la policía, no pudieron garantizar las condiciones mínimas de seguridad. Como saldo de estos graves incidentes tampoco se jugó el cruce de quinta división.
Por lo menos cuatro jugadores de los Unidos asistieron a la guardia del hospital Dr. Ernesto Accame ya que presentaron traumatismos varios, al igual que los chicos de Unión. Los profesionales debieron certificar las heridas, documentación que será utilizada seguramente en los descargos que presentarán los clubes ante el Tribunal de Penas. Desde la Unidad Sexta se informó que no hubo personas detenidas.
