Sí, un día River volvió a festejar de visitante, después de 17 partidos sin hacerlo en esa condición, y fue nada menos que en el estadio Diego A. Maradona, un escenario casi inexpugnable. El Millonario mostró momentos de buen juego ante Argentinos y lo venció con goles de Diego Buonanotte y Mauro Rosales. El descuento fue de Ortigoza.
River evidenció ciertas mejorías, un juego colectivo que por momentos despertó la ilusión del hincha y a los "pequeños" generando constantes problemas. Leonardo Astrada seguramente se fue conforme con la dupla de talento que armaron Ariel Ortega y Diego Buonanotte, la misma que le dio la última satisfacción, cuando era técnico Diego Simeone.
Argentinos fue un equipo dubitativo como pocas veces, que defendió mal y que sufrió con cada contra millonaria. Así y todo tuvo un par de chances, como la primera, cuando iban dos minutos y el Chuco Sosa hizo estremecer el travesaño, o como a los 19, cuando el mismo ex Independiente descerrajó otro balinazo que pasó cerca del arco de Vega.
River contestó con un buen disparo de Buonanotte que se fue cerca, con una gran jugada colectiva, de tipo "tiki tiki", que Ortega terminó de manera deficiente porque quiso hacer un golazo, y con una excelente contra y mejor combinación entre el Burrito y el Enano que terminó con una definición digna de éste último.
El 1-0 a esa altura parecía justo, porque River jugaba mejor y Vega no pasaba sofocones, hasta que a los 36 tuvo que actuar y lo hizo bien ante Raymonda.
Antes del descanso, Ferrari casi clava un zurdazo de novela y a los 42 el Burrito volvió a errar en la definición.
La segunda parte arrancó con todo, porque Ferrari le dio con un fierro, pero desviado, y Domínguez casi iguala con un tiro libre con pinta de centro que casi se mete. Sobre los 7, Buonanotte encaró a lo Messi, de derecha a izquierda, como varios veces durante el cotejo, y su disparo causó el esfuerzo de Torrico.
Hasta los 20 el balón trajinó sin más por el medio. Astrada le dio descanso a Buonanotte, Ortega perdió contacto con el juego y River se metió un poco más atrás y sufrió con un par de contras.
A los 28 Sosa volvió a fallar y a los 31 Vega respondió bárbaro, como toda la noche, ante Hauche. Con el Bicho jugado, Mauro Díaz (que reemplazó al lesionado Fabbiani en el PT) comando una contra y Rosales puso el 2-0. A los 44 Ortigoza descontó de penal y el Millo sufrió un poco, pero seguramente valió la pena.