Aunque el tema salarial todavía parece lejos de una solución, la atención en los hospitales rionegrinos tiende a normalizarse y las retenciones de servicios apuntan a un día a la semana, según lo que van resolviendo las asambleas en cada centro de salud.
Lo concreto es que prácticamente todos los servicios están funcionando, salvo en horarios en que se realizan las asambleas.
En Allen la atención sanitaria está garantizada en su totalidad ya que el funcionamiento es normal. Es que los trabajadores hospitalarios aceptaron el pedido del gobierno provincial de flexibilizar las medidas de fuerza, aunque el estado de "alerta" sigue siendo permanente.
Actualmente los trabajadores de hospital Dr. Ernesto Accame sólo realizan una asamblea semanal para analizar la situación general del conflicto y se encuentran desempeñando sus tareas en forma normal. Por el momento los distintos sectores hospitalarios se encuentran trabajando en la proyección presupuestaria que se les solicitó desde el gobierno provincial y que luego entregarán al secretario de la Función Pública.
En Roca, lentamente la atención en los diversos servicios de Salud hospitalarios está volviendo "a la normalidad". Los trabajadores determinaron "flexibilizar" las medidas de acción que están llevando adelante por el reclamo salarial y pretenden aunar criterios para definir cómo seguir la próxima semana. En principio, según se informó, el gremio ATE resolvió realizar un paro provincial el próximo 4 de noviembre, en tanto en las diversas asambleas locales se están definiendo las medidas de fuerza complementarias.
En el hospital de Roca, hoy se realizará una asamblea para determinar la marcha de la protesta, aunque, según informó el delegado de ATE en el Alto Valle, Jorge Rivas, la intención es acompañar lo acordado en otros hospitales de la zona, en virtud de la "necesidad de la población de acceder al sistema de salud público".
"Las medidas se van a flexibilizar, se va a retomar dentro de la normalidad ´que se pueda´ la atención a la gente, pero queremos dejar en claro que en el ámbito hospitalario sigue el estado de asamblea permanente y los días de jornada y retención de servicio serán los miércoles", explicó Rivas. Además, añadió el gremialista, "esta decisión la tomamos sólo para no afectar el derecho de la gente al servicio de salud, pero no porque lo haya pedido el gobierno provincial", destacó.
El hospital cipoleño intentó ayer volver a la normalidad después de casi tres meses de retención de servicios. Durante toda la jornada, el personal se dedicó casi con exclusividad a informar a los usuarios sobre cómo continuarán el reclamo a partir de la decisión de flexibilizar las medidas de fuerza.
La actividad fue poca y el día sirvió para comenzar a reorganizar la atención en los servicios que estuvieron casi paralizados por más de 70 días.
En términos generales, el hospital retornará a su organización habitual a partir del lunes, aunque hoy es probable que se inicie la entrega de algunos turnos.
"La normalidad será relativa. Volvemos a los problemas de siempre", aseguró la delegada de los trabajadores Cecilia Chavero. Mencionó que "el personal está recargado con horas extras, siguen faltando medicamentos y profesionales y no se realiza el mantenimiento de la aparatología", entre otros.
(Agencias Allen, Roca y Cipolletti)