NEUQUÉN (AN).- La Justicia se aprestaría a archivar la causa iniciada por la muerte de un canillita que se autolesionó en el interior del ministerio de Desarrollo Social. Al parecer la autopsia realizada ayer despejó las dudas: no hubo participación de otra persona en el hecho.
"El hombre tenía al menos dos heridas de arma blanca con entidad suficiente como para causarle la muerte, y fueron autoinfligidas", señaló una fuente vinculada al caso consultada ayer por "Río Negro".
En tanto el jefe del departamento Delitos, comisario Raúl Liria, explicó que el miércoles a las 18:30 "personal de limpieza realizaba su tarea en los sectores sanitarios (del ministerio ubicado en Anaya y Ruta 22) y encontró a una persona que se habría producido lesiones en sus extremidades y en el torso".
Agregó que "personal retirado que hace vigilancia en el lugar concurrió al sector" y cuando intentaron ayudarlo "sacó la navaja y se hirió en la rodilla". Se lo trasladó al hospital Bouquet Roldán y de allí al Castro Rendón donde falleció pasadas las 22.
El hombre, de apellido Baeza y 50 años, vendía diarios en esa zona. El ministerio aclaró oficialmente que "no mantenía ningún vínculo laboral directo ni indirecto" con esa cartera.