Jueves 29 de Octubre de 2009 Edicion impresa pag. 23 > Internacionales
Un brutal atentado recibe a Hillary en Pakistán
Más de 93 muertos y 200 heridos por un coche-bomba. Clinton prometió ayuda y repudió el ataque al mercado.

PESHAWAR, Pakistán (DPA/AFP) - Al menos 93 muertos y 200 heridos causó ayer un atentado con coche bomba en un atestado mercado de Peshawar, en el noroeste de Pakistán, poco después de la llegada al país de la secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton, que prometió que EE.UU. ayudará al país asiático en la lucha antiterrorista.

"Hay un gran número de restos de miembros que nos llegan en bolsas de plástico", dijo Abdul Hameed Afridi, director del hospital Lady Reading, que además añadió que 30 de los heridos se encuentran en condición crítica. "El porcentaje de mujeres y niños entre las víctimas es muy alto", añadió Afridi.

Según la policía, en el coche bomba estaban escondidos más de 150 kilogramos de explosivos.

El estallido, que se produjo cuando cientos de mujeres estaban visitando el mercado, causó el derrumbe de un edificio de dos plantas y el incendio de varios comercios. Se cree que aún hay varias víctimas bajo los escombros.

Hasta ahora nadie ha reivindicado la autoría del ataque pero el gobierno paquistaní culpa a los insurgentes talibanes de querer vengar la ofensiva armada contra Waziristán Sur.

Clinton inició ayer en Islamabad su primera visita a Pakistán, de tres días de duración. La capital paquistaní está situada a unos 150 kilómetros al este de Peshawar. "Estos ataques contra personas inocentes son cobardes", dijo la jefa de la diplomacia estadounidense tras reunirse con su homólogo paquistaní, Shah Mahmood Qureshi. Clinton prometió que Estados Unidos dará "la ayuda necesaria" a Pakistán, que "está en medio de una lucha contra grupos extremistas brutales y tenaces que matan a gente inocente y aterrorizan a comunidades".

Escenas del horror

"Hay mutilados, gente quemada, cadáveres, heridos", dice el doctor Muslim Khan, mientras atiende a las víctimas del sangriento atentado. La explosión provocó un enorme cráter y el derrumbe de un inmueble y de numerosos puestos del bazar de Meena, el más frecuentado de Peshawar y que en ese momento estaba repleto. "Enfrentamos una escasez de sangre. Llamo a todos los voluntarios para que vengan a donar su sangre", agregó.

"La explosión fue gigantesca. Había humo y polvo por todas partes. Vi gente morir y otras gritar de dolor", declaró Mohamed Sidique. Mientras los bomberos trataban de apagar varios incendios, la policía evacuaba apresuradamente a los habitantes del sector hacia las callejuelas aledañas al mercado.

Una mezquita y tres edificios adyacentes al mercado resultaron completamente destruidos por la explosión, que también dañó otras viviendas y automóviles .

Entre la multitud, un hombre gritaba una y otra vez el nombre de un miembro de su familia, mientras otros se mordía los dedos para no estallar en llanto delante de su tienda en llamas.

Este nuevo ataque, uno de los más mortíferos en Pakistán, se inscribe en una ola de acciones organizadas por el Movimiento de los Talibanes de Pakistán (TTP), que ha dejado más de 200 muertos en octubre. "Se trata de una respuesta de los terroristas a la operación emprendida en el Waziristán del Sur. Los matamos allá y ellos replican en nuestras ciudades", estimó el ministro Mian Iftikhar Husain. "Pero no nos inclinaremos ante los terroristas", aseguró.

Desde hace dos años, Pakistán ha sido escenario de atentados que dejaron ya 2.300 muertos, perpetrados por kamikazes del TTP, aliado de Al Qaeda.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí