Miércoles 28 de Octubre de 2009 > Deportes
El duelo de pobres terminó igualado
El último campeón recurrió a la figura de su goledor Cella Ruggeri, que marcó dos tantos. Pero al final apareció el Pato Panei y el Rojo no se fue con las manos vacías. 
El encuentro entre Centenario e Independiente de Neuquén, dos equipos de mitad de tabla para abajo, tuvo un desenlace emocionante, finalizó igualado en dos tantos con las últimas conversiones en tiempo de descuento.

El cotejo que estaba estipulado para las 18 horas en el Gigante de barrio Sarmiento, comenzó con una demora de 20 minutos. Hubo un escaso marco de público que no superaba las 100 personas que pudo deberse al presente de ambos o a la lluvia que se produjo ayer.

En los primeros minutos se observó al equipo local nervioso e impreciso en las primeras líneas. Sin embargo, la primera ocasión llegó por medio de Nico Herrera que pudo abrir el marcador, pero Carlos Iturra le achicó rápidamente el arco y tapó con sus pies.  

Como el Rojo neuquino no tenía juego y llegada, Finessi optó por patear de larga distancia pero fue débil y sin problemas para Ezequiel Ezandi.

Recién a los 21 la visita tuvo el gol en los pies de Tomás Mac Kenzie, sin embargo el 1 tuvo una excelente respuesta y se lo opacó.

Luego, todo fue de Centenario y de su goleador Cella Ruggeri que tuvo un gran desempeño. No sólo se las ingenió para aparecer sin marca en cada centro que ingresaba al área, sino que jugó muy bien de espaldas al arco, aguantando y rebotando el balón hacia sus compañeros.

Gabriel Cella Ruggeri tuvo tres cabezazos que pasaron muy cerca, dos por el costado y uno por arriba del horizontal. También Rafael Leiva desperdició la suya, tras una pirueta (tijera) desde el centro del área grande que Iturra la encontró.

A los 38 minutos Manolo Vallejos estrelló la pelota contra el travesaño de un tiro libre muy bien ejecutado.

En el segundo tiempo Centenario lo madrugó y a los 7 se puso en ventaja. Alberto Mora, el referí del encuentro, vio una mano en el área y pitó la pena máxima. El 9 mostró clase y tiró a media altura bien pegado al palo derecho. El 1 del Rojo fue hacia ese lado pero nada pudo hacer.  

Transcurrían los 14 y Claudio Guajardo (8) que circulaba por la derecha observó una buena diagonal de Finessi y lo dejó de frente a Ezandi que atajó con los piés, el rebote le quedó un poco atrás al 8 que no pudo conectar el balón. Casi logra el empate.

Independiente movió un poco las piezas. Tomás Mac Kenzie ocupó la posición de enganche y el Pato Panei se fue más hacia arriba por el costado izquierdo. Ahí el equipo del Papi Dehais comenzó a jugar y coordinar de manera colectiva.

El partido fue interrumpido dos veces porque no se prendían las luces del estadio, lo que llevaría al árbitro a adicionar varios minutos que serían relevantes porque ahí sucedió el resto.

A los 40 el Rojo igualó el marcador. Mac Kenzie abrió hacia el Pato, quién habilitó de forma prolija con un pase rasante a Finessi que sólo la empujó a la red, imposible de marrarlo.

Al instante Ignacio Albornoz, de Centenario, vio la roja y dejó a su equipo con 10.

La visita se despertó y fue a sumar sus primeros tres puntos. Matías Bandracco desperdició la chance sólo contra el 1 ya que su remate se fue muy pegadita al poste izquierdo.

Independiente en esos momentos intentó, pero el que sorprendió fue el último campeón. Tras un intento de pase o tiro al arco, a los 49 minutos, la pelota le quedó al goleador Ruggeri, en posición dudosa, que sólo le bastó con tocarla.

Al instante se prendieron las luces, no sólo del estadio sino también de la visita. A los 52 y cuando ya no quedaba más por jugar, un centro desde la derecha fue a parar a la cabeza del Pato Panei que la aseguró y colocó la igualdad para los Rojos.

Fue un empate que no dejó conforme a nadie, ya que el último campeón quedó con 5 puntos, a 10 de Maronese, e Independiente no encuentra la victoria.

Redacción Online.

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