Durante el mes de octubre se conmemora el mes mundial de Lucha Contra el Cáncer. Lalcec General Roca adhiere a esta fecha, cuya iniciativa surgió en el año 1991, resaltando la importancia de la prevención a través de la consulta y la realización de los controles preventivos.
Actualmente el cáncer de mama es la causa más frecuente de muerte por cáncer en la mujer occidental. Es la 1ª causa de cáncer ginecológico en la mujer, donde 1 entre 8 - 10 mujeres lo pueden padecer, teniendo en cuenta que se manifiesta en la glándula mamaria y puede presentar manifestaciones subclínicas (imágenes mamográficas) o clínicas (nódulo). Desde allí tiende a afectar los ganglios axilares y puede dar metástasis (diseminación a distancia) en pulmones, hígado, huesos, piel, cerebro.
Las razones específicas de su aparición son todavía desconocidas. Pero se encuentran factores de riesgo que elevan las posibilidades de afectación como la edad de la primera menstruación (menarca), antes de los 10 años, o menopausia tardía, donde el tiempo de exposición a hormonas (estrógenos) es importante.
El rol de las hormonas exógenas es relativo, ya que no se encuentra demostración que los anticonceptivos hormonales lo eleven, pero si está demostrado que la terapia hormonal de reemplazo de más de 5 años en forma ininterrumpida lo incrementa. Los antecedentes hereditarios (madre, abuela, tía, hermana con cáncer de mama), son factores de riesgo para esta afección, identificando un grupo de genes (BCRA 1, BCRA 2); de todas maneras en el 75% de las mujeres con cáncer de mama no registran ningún antecedente familiar.
Este es uno de los tumores en los que el autoexamen, las consultas periódicas al especialista y la mamografía de control, han logrado aumentar los porcentajes de diagnóstico precoz, y de elevar el porcentaje de tratamiento y curaciones.
De acuerdo a la etapa de detección del tumor maligno mamario, los tratamientos pueden ser conservadores desde la resección del nódulo más radioterapia, hasta la necesidad de extirpar la mama completa. De todas maneras la posibilidad de realizar actualmente la reconstrucción mamaria inmediata o diferida logra disminuir el impacto psicológico, mejorando la recuperación de la imagen corporal.
Dependiendo del estadio y los factores pronósticos, identificados en la biopsia, algunos pacientes pueden recibir tratamientos complementarios como quimioterapia u hormonoterapia, o ambas. Es importante recalcar que realizando la mamografía de control y los controles periódicos se detectan enfermedades en etapas previas al cáncer o en etapas iniciales, donde los tratamientos pueden curar la enfermedad.
Por eso la realización de controles clínico- mamográficos deben comenzar de acuerdo a diferentes escuelas desde los 35 años el primer control y luego de los 40 en forma anual.
Debemos entonces tener en cuenta que si insistimos en los controles periódicos, la consulta precoz y el tratamiento adecuado y si en lo posible manejado por un equipo multidisciplinario, detectaremos en una etapa aún más precoz y podremos realizar tratamientos con altas posibilidades de curación definitiva.
FERNANDO MORELLO (*)
(*) MP Nº 3301
Médico asesor de Lalcec
