La Cancillería Argentina, a través de Alfredo Chiaradía, le transmitió ayer al embajador de Brasil en Buenos Aires, Mauro Vieira, el reclamo formal para que Brasil libere la mercancía argentina en tránsito "porque es inaceptable que detengan camiones en la frontera, con mercadería perecedera y sin aviso previo", informaron en la Cancillería.
La reacción de Vieira: tomó los documentos presentados y se comprometió a llevar "las inquietudes argentinas" al Palacio de Itamaraty, donde se encuentran las máximas autoridades diplomáticas de Brasil.
Al cierre de esta edición, fuentes oficiales dijeron a la agencia DyN que habían comenzado a liberar camiones. Lanacion.com señalaba que eran 500 los que dejaron pasar por Uruguayana. Sin embargo fuentes empresarias aclararon anoche que todavía ningún embarque de fruta de la región había conseguido la autorización para seguir viaje y seguían varados tanto en Uruguayana como en Foz de Iguazú.
Los pocos avances que se conseguían en la reunión no cayeron bien en el empresariado del Valle. La sospecha era que la negociación "llevará su tiempo" y tiempo es lo que no le sobra a la actividad. De aquí al fin de la temporada la región preveía exportar alrededor de 18 millones de dólares entre manzanas y, en menor medida, peras. Frenar el comercio generará consecuencias directas en el Valle. La más importante es que se perderán de exportar alrededor de 300.000 dólares de fruta por día o, lo que es lo mismo decir, más de 1 millón de pesos cada 24 horas.
Desde las oficinas de la embajada de Brasil en Buenos Aires dejaron trascender que "todo este problema aduanero se resolverá en la próxima bilateral del 19 de noviembre". Pero los productos perecederos, como es el caso de la fruta, no pueden esperar.
En la medida en que las manzanas que están en las cámaras de frío no mantengan sus programas de salida, esta oferta se destinará al mercado interno presionando los valores que hoy está obteniendo esta fruta en las góndolas locales. "No hay forma de que todo lo que está proyectado destinar a Brasil se reoriente al mercado interno", confió un operador de la región al ser consultado por el tema.
El gerente de CAFI, Marcelo Loyarte, aseguró que "observa con alta preocupación el desarrollo de las negociaciones. Nosotros no podemos esperar hasta la próxima bilateral. Enviaremos una carta a Cancillería para que el tema de la fruta y otros perecederos sea tratado cuanto antes".
Para el gobierno argentino, la "falta de aviso previo" es uno de los puntos centrales del reclamo diplomático. Con esta actitud Brasil presiona a la Argentina para que libere las restricciones que sufren sus productos para entrar al país. (Redacción Central)