SANTIAGO DE CHILE.- Miles de funcionarios públicos chilenos realizaron ayer una huelga en reclamo por mejoras laborales contra el gobierno de Michelle Bachelet, paralizando servicios tributarios, militares y sociales, entre otros.

"Tenemos una mesa de negociación, no le veo sentido a esta movilización", alegó ante la medida de presión el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma.

La autoridad además criticó la huelga indefinida que pretenden iniciar el viernes decenas de miles de profesores públicos, la que amenaza con hacer perder el año lectivo a la mitad de los escolares. "Los niños de escuelas municipalizadas han tenido un año con muy pocas clases (debido a otras protestas). Volver a someter al sistema municipal a un nuevo paro significa perjudicar la educación", opinó.

No obstante, el presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, reclamó que fue el gobierno el que quebró las negociaciones al no proponer una solución para la llamada "deuda histórica", vinculada a un reajuste que no recibieron los profesores en 1982 y que hoy suma 10.000 millones de dólares.

"La autoridad llegó con cero propuestas y señaló que la reparación de la deuda histórica no está en agenda", comentó Gajardo.