NEUQUÉN (AN).- El Ministerio de Desarrollo Social firmó un convenio con el gobierno nacional por el cual recibió 2.155.060 pesos para destinarlos a microcréditos. Se trata de fondos que buscan generar empleo, y suplantar subsidios provinciales.
La partida presupuestaria llega tras el acuerdo entre el ministro César Pérez con autoridades de la Comisión Nacional de Coordinación del Programa de Promoción del Microcrédito, para el Desarrollo de la Economía Social.
El aporte significa un apuntalamiento al trabajo que realizan algunas organizaciones sociales, que por fuera de este marco ya habían conseguido fondos nacionales, en el contexto del Banco Popular de la Buena Fe, que distribuye líneas de crédito de baja escala sin el requisito de una garantía formal. El tomador del crédito asume, de palabra, la responsabilidad de devolver los fondos.
Por eso se dice de esta metodología de respaldo económico que promueve un cambio cultural, al revalorizar el valor del compromiso asumido, en medio del desmembramiento del tejido social provocado por la crisis económica.
Los indicadores son alentadores: hay una alta tasa de devolución de los fondos, cercana al 90%.
Pérez informó que la fundación Otras Voces, que impulsó desde 2005 la entrega de microcréditos, será parte del comité que definirá quiénes podrán acceder al financiamiento. Junto a este organismo, también lo definirán el ministerio y la Legislatura.
"Se rescata el valioso trabajo que hace esta organización, que ya tiene detectados posibles emprendedores destinatarios", dijo Pérez, ayer desde Buenos Aires, en referencia a la ONG que ya canalizó créditos para unas 4.000 personas de toda la provincia.
Los préstamos que se darán a partir del ingreso de nuevos fondos, "serán destinados a financiar la actividad de emprendimientos individuales o asociativos que se organicen en torno a la gestión del autoempleo", señaló el ministro.
El objetivo del aporte es que se conformen pequeñas células de emprendedores. "Se entregan aportes a grupos de cinco personas. Hasta 7.500 pesos", dijo Pérez, quien señaló que el límite es de 1.500 para cada uno.
Parte del plan implica un seguimiento y asesoramiento de la evolución del proyecto. En un primer tramo, los productores acceden a una capacitación. Se busca que tengan herramientas para hacer viable un ingreso propio.
Pérez señaló que el aporte que recibió la provincia, puede volver a darse, con las mismas características, cada 12 meses.
