Miércoles 21 de Octubre de 2009 Edicion impresa pag. 32 > Sociedad
Polémica y accidentes en Rincón
Los vecinos reclaman controles de tránsito sorpresivos ante la cantidad de infracciones.

RINCÓN DE LOS SAUCES (ARS).- Con un promedio de dos accidentes diarios, esta ciudad debate permanentemente sobre la falta de control de tránsito en horarios pico y las altas velocidades de vehículos petroleros y particulares. Ayer, dos choques más avivaron la polémica y las críticas ante la ausencia de controles preventivos.

El primer hecho ocurrió poco después de las 9.30, cuando un Fiat Duna, que según testigos circulaba a alta velocidad, impactó de frente contra un poste de electricidad sobre calle Misiones, a pocos metros del cuartel de Bomberos. El auto era conducido por una persona que resultó con lesiones de consideración producto del golpe.

El comisario Jorge Garrido, de la unidad policial 35, indicó en declaraciones a la radio Estación Urbana que "el conductor de este vehículo estaba en estado de ebriedad, situación que pudimos comprobar a priori por su intenso aliento etílico; ahora se le realizará el análisis de sangre para comprobar el grado de alcoholización que presentaba", señaló.

Vecinos aseguraron que el Duna transitaba a alta velocidad por el centro local y exigieron que "a personas en estas condiciones se les quite de manera definitiva el carné de conducir".

A las pocas horas de ese hecho, un accidente entre un Volkswagen Gol color blanco y una moto de reparto volvió a encender a la opinión pública.

El accidente ocurrió a sólo 100 metros del lugar del primer episodio, en la esquina de Misiones y Juan Manuel de Rosas. El automóvil embistió casi de frente al mensajero en moto, quien resultó con serios traumatismos y su estado hasta ayer era reservado.

Las miradas de la población están puestas en el área municipal de tránsito. Es que durante meses no se realizaron operativos porque no había dinero para pagar las horas extras del personal. Así lo había confirmado el intendente Hugo Wernli en una entrevista por el mismo medio radial, quien aseguró: "Asumo en este momento el compromiso de sacar a los inspectores a las calles para que controlen el tránsito".

Sin embargo, los operativos sólo se mantuvieron por algunos días y volvió de manera paulatina la ausencia casi total de los inspectores en la ciudad.

Por otra parte, la población asegura que "de nada sirven los operativos que hacen en la plaza y otros lugares donde colocan conos de advertencia y se puede ver a los inspectores a tres o cuatro cuadras? Los que vienen a alta velocidad pasan el control a menos de 40 km/h y después vuelven a correr", dijeron. Y agregó una vecina: "que trabajen agazapados como hacen en cualquier otra ciudad y así podrán atrapar a los infractores cuando cometen las faltas? todo el sistema es una vergüenza".

La velocidad máxima en zona urbana es de 40 km/h y la máxima en zona de ruta por área urbana es de 60 km/h, pero muy pocas personas respetan las normas. Un gran porcentaje de infractores son operarios petroleros con camionetas de empresas a su cargo.

Paradójicamente, los mismos operarios no circulan a más de 40 kilómetros por hora en los yacimientos, porque son detenidos por la empresa Prosegur y automáticamente se quedan sin trabajo.

Use la opción de su browser para imprimir o haga clic aquí