Sábado 17 de Octubre de 2009 Edicion impresa pag. 6 > Nacionales
Débil crecimiento del 0,1% no aleja el peligro de recesión
Indec asegura que la economía retomó la senda positiva. Las planillas oficiales dan poca información sobre el método.

BUENOS AIRES (DyN).- La actividad económica registró en agosto un crecimiento de 0,1 por ciento frente al mismo mes del año pasado, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

De esta forma en ocho meses, se acumuló una expansión de 0,2 por ciento, frente al mismo período de 2008.

Si se compara con julio, la actividad económica registró un crecimiento de 1,1 por ciento.

Los datos corresponden al Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), indicador que el Indec difunde todos los meses a modo de adelanto de la evolución del PBI que se comunica trimestralmente. El alza interanual de 0,1 por ciento quiebra tres meses consecutivos de caída, pero de todas formas las cifras acercan más a la economía argentina a caer técnicamente en recesión; al menos desde los números oficiales, ya que para los privados esto ya sucedió.

Se considera que una economía ingresa en recesión luego de dos trimestres consecutivos con variaciones negativas del nivel de actividad.

Durante el segundo trimestre de 2009 la Argentina experimentó un retroceso de 0,8 por ciento y en julio, primer mes del tercer trimestre, la economía cayó 1,5 por ciento.

En consecuencia la suba de 0,1 por ciento revierte la tendencia negativa pero obligará a un septiembre con un crecimiento muy similar al 1,5 por ciento para evitar que se completen los dos trimestre con cifras en rojo.

Pocos detalles

La planilla oficial difundida ayer por el Indec no ofrece información acerca de cómo y porque se logró pasar de una caída de 1,5 por ciento a una suba de 0,1 por ciento.

En las semanas previas el Indec había informado que dos de los sectores de mayor nivel de actividad económica habían sufrido caídas: la industria bajó 1,4 por ciento y la construcción 2,9 por ciento.

En tanto, el comercio exterior sufrió un deterioro de 40 por ciento en las exportaciones y de 37 por ciento en las importaciones.

Estas bajas fueron compensadas en parte por una leve alza del consumo interno. El IVA impositivo de septiembre (o sea el IVA que se consumió en agosto) aumentó 21,7 por ciento, cifra que tras el ajuste por inflación muestra un tenue avance del mercado interno.

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