COCHABAMBA, Bolivia.- Los países miembros de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) reafirmaron ayer su vocación y unidad "antiimperialista" en la jornada inaugural que se desarrolló en la ciudad boliviana de Cochabamba con la participación de tres mandatarios y tres primeros ministros.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, como anfitrión dio la bienvenida a los visitantes en el acto central que se realizó en el hotel Cochabamba, con arreglos florales alusivos a la hoja de coca y la leyenda "ALBA-TCP. Coca, no es cocaína".
"Los presidentes también nos hemos organizado en sindicato, un sindicato de presidentes antiimperialistas que están reunidos hoy en Cochabamba para seguir profundizando nuestros pensamientos cómo resolver el sufrimiento de nuestros pueblos, pero también con gran sentimiento por las injusticias sociales. Eso nos une para trabajar de manera conjunta", dijo Morales.
El lanzamiento del "sucre" como moneda de intercambio comercial, la creación del Tribunal de Arbitraje Internacional y la aprobación de una política de protección del medioambiente son metas de la séptima cumbre presidencial de la ALBA.
Los miembros del bloque de la ALBA son Venezuela, Bolivia, Cuba, Nicaragua, Honduras, Dominica, San Vicente y las Granadinas, y Ecuador. Como países invitados están Paraguay, Uruguay, República Dominicana, Haití y Rusia. Entre los temas que serán aprobados se anticipa un endurecimiento de las sanciones al actual gobierno de facto de Roberto Micheletti en Honduras. (DPA)