Vélez sumó porque fue al frente y Lanús se quedó corto porque fue amarrete. El campeón fue hasta el sur bonaerense y aunque perdió la punta del torneo, rescató una unidad ante un equipo que lo controló en gran parte del encuentro, pero que se retrasó demasiado. Fue 1-1 en el segundo duelo de la fecha 9.
El inicio fue de ida y vuelta, y por eso las situaciones no tardaron en llegar. Casi termina en gol de Jonathan Cristaldo, en la primera conexión ofensiva con Rodrigo López; y el local respondió con un buena maniobra entre Marcos Aguirre y Cristian Menéndez, que se lo perdió solo en el borde del área chica.
Después del cuarto de hora estalló el estadio Granate. En un tiro libre, Maxi Velázquez le dio duro, la pelota pegó en la barrera y descolocó a Germán Montoya para el 1-0.
Desde ahí hasta el final de la etapa, el local no hizo más que justificar la diferencia. Eduardo Salvio fue una pesadilla para la "parchada" última línea velezana (faltaron sus cuatro titulares, Ponce, Otamendi, Domínguez, Papa), que sufrió ante cada avance del equipo de Luis Zubeldía.
El Toto participó en las cuatro claras que tuvo Lanús, dos veces con disparos propios y un par con pases a Sebastián Blanco y el movedizo Menéndez, que le ganó la pulseada a Santiago Salcedo.
En lo que ya es una marca registrada de Ricardo Gareca, Vélez entró con caras nuevas en el segundo tiempo. El Flaco buscó rápidas respuestas, pero no las encontró. Alejandro Cabral tuvo una clara de "media-chilena", Leandro Caruso no gravitó como en otras noches y el tercer intento fue con el interminable Roly Zárate.
Del otro lado, un objetivo claro: mantener la diferencia. Con los ingresos de Agustín Pelletieri y Rodrigo Erramuspe quedó claro que el DT local le bajó la persiana al partido y su única ficha ofensiva la puso a una contra.
Lanús se metió atrás y al final lo pagó caro. No le llegaron con claridad, es cierto, pero en un descuido, Leandro Somoza sacó un fuerte remate que venció la resistencia de Agustín Marchesín y logró el merecido 1-1. Vélez lo fue a buscar y tuvo el premio. El dueño de casa fue amarrete y apenas sumó por uno.
El manotazo de ahogado de Zubeldía llegó con el ingreso de Salcedo y el paraguayo casi le da la victoria al local. El travesaño "explotó" con una "bomba" del centrodelantero, en la última acción de una noche entretenida, que dejó al campeón sin punta y al Granate muy lejos en las posiciones.
