NEUQUÉN (AN).- La Pastoral Social del Obispado de Neuquén pidió que "el Estado deje de estar ausente" en temas como educación, salud, tierra, viviendas y empleo, y reclamó "la urgente e imprescindible redistribución de la riqueza" en la provincia.
En un comunicado de prensa que firma el sacerdote Rubén Capitanio, la Pastoral sostuvo que el Estado debe renunciar "a las excusas habituales" que consisten en prometer y "hacer campaña cuando su deber es actuar hoy", dijo.
Mediante el documento se pidió "la urgente e imprescindible redistribución de la riqueza "a fin de evitar la explosión social que tarde o temprano toda injusticia social acarrea. De ocurrir esto -advierte la Pastoral- " no serán responsables de la misma los que exploten sino los que no hicieron lo necesario para evitarla".
Celebración mundial
El documento se divulga en oportunidad de celebrarse hoy la Jornada Internacional para la Eliminación de la Pobreza establecida por Naciones Unidas en 1992.
Esa jornada, recuerda Capitanio, nació por iniciativa del sacerdote Joseph Wresinski, que colocó el 17 de octubre de 1987 en París una piedra con la siguiente inscripción: "Allí donde haya hombres condenados a vivir en la miseria se violan los derechos humanos. Unirse para hacerlos respetar es un deber sagrado".
En el documento, Capitanio recuerda palabras del papa Juan Pablo II: "Nunca más discriminaciones, exclusiones, opresiones, desprecio de los pobres y de los últimos".
La Iglesia neuquina tiene un compromiso de años, fundado por Jaime de Nevares, con los sinvoz, los marginados y los pobres de la provincia.