BUENOS AIRES.- El Consejo de la Magistratura suspendió ayer, y mandó a juicio político, al juez federal de Zárate-Campana, Federico Faggionatto Márquez, quien la semana pasada había obtenido un virtual aval del kirchnerismo para continuar en su cargo.
El Plenario del Consejo, con la sugestiva ausencia de los cinco representantes del oficialismo, aprobó con siete votos -dos más de los necesarios- el dictamen acusatorio presentado por el senador radical Ernesto Sanz, y desechó el desestimatorio impulsado por el sector K, con el determinante voto de la diputada Diana Conti la semana pasada.
Faggionatto, quien investiga la denominada "Ruta de la efedrina", quedó automáticamente suspendido en el cargo y en el lapso máximo de seis meses deberá afrontar un juicio político, en el que sus acusadores por parte del Consejo serán precisamente el senador Sanz y el juez Luis María Cabral.
La situación de Faggionatto Márquez parecía encaminada a la ratificación en el cargo después de una suerte de rescate del oficialismo en el Consejo, que la semana pasada, en la Comisión de Acusación y Disciplina, había recomendado el rechazo al juicio político.
La votación había quedado empatada en tres y debió definir la diputada Conti con su voto doble como presidenta de la Comisión, y se había inclinado por desestimar el juicio político.
Con sus cinco integrantes en el Consejo (los diputados Conti y Carlos Kunkel, los senadores Marcelo Fuentes y Nicolás Fernández, y el viceministro de Justicia, Héctor Masquelet), el kircherismo dispone de un virtual poder de "veto" en los plenarios, ya que una decisión como la adoptada hoy con Faggionatto requiere de los dos tercios de los consejeros presentes.
Cinco votos negativos sobre un total de 13 obstaculizan cualquier decisión que necesite mayorías calificadas, pero hoy, sorpresivamente, ninguno de los cinco miembros K del Consejo asistieron al plenario.
Así, los consejeros Sanz, Cabral, Mariano Candiotti, Pablo Mosca, Miguel Ángel Gálvez, Santiago Montaña y Oscar Aguad se pronunciaron a favor del dictamen acusatorio, mientras el presidente del Consejo, Luis Bunge Campos, propuso postergar el tratamiento del tema en cuestión.
Sólo Montaña mostró una disidencia parcial, pues sostenía que no debía suspenderse en el cargo a Faggionatto Márquez, aunque sí someterlo a juicio político, pero su postura no fue aceptada por el resto de los consejeros. (DyN)
