NEUQUÉN (AN).- Las ventas de gasoil, un claro indicador del ritmo económico, cayeron en la provincia de Neuquén el doble de lo registrado a nivel nacional. Así se desprende de los datos de la secretaría de Energía de la Nación que da cuenta de que en la comparación interanual entre agosto de 2008 y de 2009 la comercialización de este combustible se redujo un 22,85% en esta provincia, mientras que la media del país fue del 9,8%.

Para las autoridades de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Río Negro y Neuquén, esta brusca modificación del ritmo de ventas se debe fundamentalmente a la caída de la actividad del sector hidrocarburífero. "La actividad petrolera tiene una fuerte incidencia en el consumo de gasoil y si bien la caída de las ventas refleja una crisis económica generalizada, esta fuerte diferencia creemos que se debe a la reducción en la actividad petrolera", aseguró el secretario del organismo de expendedores, Carlos Pinto.

De acuerdo a los datos oficiales, en Río Negro las ventas de gasoil cayeron apenas medio punto más que a nivel nacional situándose en el 10,35%, y marcando una diferencia importante con Neuquén, donde las estadísticas se ven disparadas en todos los casos.

Esto es así dado que mientras en todas las provincias se evidenció en este año una contracción en las ventas de naftas del 27% y una suba, producto del desplazamiento de los consumidores, de las naftas súper del 15,68%, en Neuquén la caída de las naftas premium alcanzó el 40% (cuatro puntos más que en Río Negro) y el crecimiento de las naftas súper trepó hasta el 22,24%.

"La mala temporada turística también perjudicó las ventas en el interior provincial", advirtió Pinto, que destacó con entusiasmo que "de acuerdo a nuestros cálculos a partir de septiembre se viene evidenciando un leve repunte en las ventas de todos los combustibles".

Los datos de la Secretaría de Energía de la Nación refleja que mientras a nivel nacional y también en el caso de Río Negro el consumo de combustibles medido en metros cúbicos es similar al registrado en 2006, en el caso neuquino la comparación se relega hasta 2004 y pone en evidencia la caída general de la actividad económica.