NEUQUÉN (AN).- En el subsuelo del edificio del Consejo Provincial de Educación (CPE), funciona el Centro de Documentación e Información Educativa de Neuquén (Cedie) y una de las bibliotecas pedagógicas más importantes de la Patagonia, clave para estudiantes de magisterio y docentes
La biblioteca -que se abrió de lleno hacia las nuevas tecnologías- cumplió el vienes 42 años y es voluntad de la dirección difundir la trascendencia de este centro que en sus escaparates guarda 9.611 libros (de diversas temáticas y géneros, siempre vinculados a la formación y práctica docente), que totalizan unos 12.500 volúmenes.
Las publicaciones periódicas ascienden a 319 títulos, con 6.163 volúmenes, y se cuenta con suscripciones a revistas pedagógicas internacionales. También forman parte del acervo documental proyectos educativos institucionales y otros documentos no editados comercialmente, láminas y documentos en soporte informático. La videoteca cuenta actualmente con 310 títulos en cintas de VHS, 235 títulos en soporte CD y 56 en DVD, con documentales y material pedagógico. Además, en el sector de Legislación se tiene acceso a diversos tipos de normas legales tales como leyes, decretos, resoluciones y circulares atinentes al ámbito de la educación.
El Centro de Documentación -que ahora funciona en Colón y Belgrano- fue creado el 9 de octubre de 1967, por disposición 345 de la Dirección de Educación. La misión fue centralizar toda la documentación educativa provincial, regional, nacional e internacional, como también la de su difusión. En 1969 se creó la Biblioteca Pedagógica, impulsada por la compra y donación de material bibliográfico educativo.
El material adquirido se agrupaba en diversas temáticas y posteriormente se confeccionaban Boletines Informativos, que eran distribuidos en todos los establecimientos de la provincia. La realización de los boletines se efectuaba con mucho esfuerzo. El trabajo, que era manual, consistía en picar esténciles -láminas de papel carbónico- con la máquina de escribir para luego pasarlos por el mimeógrafo. Se trataba de un trabajo artesanal, tanto por su impresión como por su armado.
Con el paso del tiempo, la Biblioteca creció considerablemente. Esta evolución fue a partir de adquisiciones y aportes de diferentes programas nacionales, lo que hace que la atención al público sea de especial importancia y que demande la mayor dedicación del personal del Centro de Documentación, que hoy llega a 17 personas.
Anualmente se registran más de 14.000 consultas, con una concurrencia promedio diaria de 60 usuarios. El total de socios es de 4.719 personas.