WASHINGTON (AP).- La NASA hizo estrellar ayer dos artefactos espaciales en el polo sur de la Luna, en un intento por detectar hielo oculto bajo la superficie, pero el experimento no parece haber arrojado demasiada luz y el espectáculo astronómico que muchos previeron no ocurrió. Los instrumentos confirmaron que un cohete vacío se estrelló en el satélite natural a las 11:31 GMT, seguido cuatro minutos después por una sonda con cámaras que se supone sacaron fotografías del primer impacto.
El gran espectáculo que la NASA había prometido, sin embargo, realmente no ocurrió. Las pantallas mostraron imágenes borrosas y ninguna fotografía inmediata del impacto o de la nube de polvo lunar de seis millas de alto que buscaba crear la misión.
Las autoridades de NASA dijeron que sus instrumentos estaban trabajando, pero que las planeadas fotografías en vivo estaban ausentes. Los funcionarios de la NASA recabaron información de la nave y de telescopios de todo el mundo, pero la mayoría de las fotos que mostraron el viernes en una conferencia de prensa eran de antes de que los artefactos se estrellasen. Las fotos y videos del impacto eran borrosas y no se veía mucho.
De todos modos, los científicos de la NASA estaban satisfechos. "Esto es muy positivo", expresó Jennifer Heldmann, coordinadora de la campaña de observaciones. "Estamos encantados". "Ahora vamos a ver la Luna con otros ojos", sostuvo el jefe del departamento lunar de la NASA Michael Vargo. Muchas personas se levantaron antes del amanecer para observar el impacto del cohete.
El cohete experimental y la sonda que lo siguió estaban en una misión de búsqueda de hielo oculto bajo la superficie lunar. El impacto deliberado del cohete no tripulado buscaba levantar una nube de polvo lunar para ver si entre los residuos había rastros de agua.
La sonda espacial, llamada LCROSS, tenía cinco cámaras y cuatro instrumentos científicos más a bordo. En el primer golpe de ayer, una parte de 2,2 toneladas de un cohete chocó contra la Luna al doble de la velocidad de una bala, lo cual equivale a la potencia de 1,5 toneladas de dinamita. Cuatro minutos después ocurrió lugar el segundo, con una fuerza menor.
Para quienes temen que choques semejantes pudieran causar un cambio de órbita del satélite o la caída de pedazos enormes en la Tierra, los científicos de la agencia espacial tuvieron algunas palabras tranquilizadoras. Aseguraron que ese tipo de colisiones no tienen en la Luna un efecto mayor a una pestaña que cae en un avión.