ROCA (AR).- La floración atrasada en frutales de pepita, combinado con el "adecuado" clima que está trayendo la primavera para el sector de la producción, está manteniendo a buen resguardo a las chacras de la zona, pero las heladas tardías están al acecho.
Por eso, recomendaron los especialistas, los productores deben estar alertas y muy atentos a los bruscos descensos de la temperatura porque, aunque el termómetro marque "1 ó 2 grados bajo cero", esto puede traer fuertes dolores de cabeza a los chacareros. Sobre todo, a aquellos que cultivan especies de carozo y vid.
Miguel Tassara, técnico agroclimatológico del INTA, aconsejó seguir realizando las tareas de defensa pasiva -limpieza y preparación de suelo, riego- para estar atentos ante cualquier cambio en los pronósticos.
Tassara indicó que en la región del Alto Valle no hubo, hasta el momento, grandes sobresaltos, aunque en Valle Medio las chacras sufrieron, durante la madrugada del domingo pasado, temperaturas que rozaron los 5 grados bajo cero y esto ocasionó daños en la producción, los que aún no fueron cuantificados.
"Todavía no ha habido grandes heladas, pero la más fuerte afectó bastante, aparentemente por lo que pude conocer, en Valle Medio y, en Neuquén, en la zona de El Chañar. Anduvo entre los 5 y 6 grados bajo cero y creo que no se esperaba tan fuerte", indicó.
En el Alto Valle, "hay pronósticos de 2 grados bajo cero para la madrugada de mañana (por hoy) pero dicen que en la semana va a ir subiendo la temperatura", explicó el técnico del INTA Alto Valle
En tanto, Tassara destacó que los frutales de pepita están en etapa de cuaje e ingresando en etapa de plena floración, con un atraso de "alrededor de 10 días". Esto "se ha dado, principalmente, porque la primavera ha venido medio fresca? Pero esto es mejor para las heladas, porque hay menos peligro", sostuvo.
Con temperaturas que ronden 1,5 ó 2 grados bajo cero, expuso, "y dependiendo de la duración de la helada", podría haber daños en los frutales si no se aplica un mecanismo de defensa de la producción.
Por tal razón, aconsejó realizar las prácticas pasivas de defensa, "preparar el suelo y quitar las malezas para que esté compactado y húmedo para estar mejor preparados", puntualizó.
Un factor también a tener en cuenta es el del viento. Consultas realizadas ayer permitieron conocer que a pesar de las ráfagas de estos días no hubo que lamentar mayores daños, los que se sí se hubieran producido de estar más avanzado el estado del fruto. De todos modos, se considera que siempre los daños por el viento son de mucha menor envergadura que los que puede ocasionar un helada intensa.
