"Yo respeto lo que piensa mi hermana y no tengo nada que decir de lo que piensa Victoria, pero yo pienso diferente. El afecto que siento por ella es aparte. Las diferencias que tenemos respecto de lo que pasó en la época de la dictadura son diferencias que pienso que tiene todo el país", dijo Eva Donda ayer, tras participar el lunes del acto organizado por la Asociación de Familiares y Amigos de las Víctimas del Terrorismo en la Argentina, que pide que sean juzgados los integrantes de ERP y Montoneros por los hechos de los años 70.
Eva es hija de desaparecidos y una de tantos nietos apropiados por los militares. Su hermana, Victoria, es una voz que permanentemente denuncia los crímenes de la dictadura.
Eva indicó que decidió hablar porque está "cansada" y porque quería demostrar su "punto de vista" sobre lo sucedido en la última dictadura.
Durante su discurso en el acto llamó a "dejar los odios y rencores de lado" y a ponerse a "trabajar todos juntos por el país".
Eva Donda aseguró que sigue sufriendo porque la persona que la crió "está presa" y dijo que cree que hay muchos otros en esa situación "porque hay muchos chicos que se criaron con militares".
Por su parte, su hermana Victoria, que había hablado minutos antes con la misma radio, expresó que "es difícil de entender" la actitud de Eva.
"Es complicado saber que la persona con la que más compartís, por lo menos en materia genética, defienda a quienes asesinaron a tus padres ", expresó la diputada del bloque Encuentro Popular y Social.
Las hermanas Donda fueron criadas por su tío Adolfo Donda, un militar involucrado en la desaparición de su propio padre.
"Yo no quiero discutir con ella (en referencia a su hermana Eva)", aclaró la diputada Victoria Donda, quien sí consideró "una actitud realmente deleznable" la de quienes organizaron el acto y le pidieron a su hermana "que hablara desde lo afectivo".
En este sentido, dijo tener constancia de que quienes le pidieron eso fueron el propio Adolfo Donda, detenido por crímenes de lesa humanidad, y su esposa.