NEUQUÉN (AN).- Lo que era una plácida tarde de juegos con su abuela, terminó para una nena de cuatro años de una forma impensadamente cruel: ahora pelea para recuperar su salud, en una clínica privada, luego de que se le viniera encima la estructura de hierro que sostenía la hamaca.
Ocurrió el sábado, cerca de las 18:45, en una plaza ubicada en Sargento Cabral y Peñaloza.
El Policlínico Neuquén, donde permanece internada, informó ayer por la tarde que la niña está con "pronóstico reservado".
El parte oficial de su salud da cuenta de que recibió lesiones en las zonas "hepática, pancreática y pulmonar", lo que daba lugar a un cuadro severo. Los médicos seguían de cerca la evolución del caso, acongojados por el desafortunado episodio, que dio un tinte sórdido la tarde del sábado en la plazoleta.
Fuentes judiciales informaron que el accidente habría ocurrido cuando la estructura que sostiene a algunas de las hamacas que hay en la plaza se le cayó encima a la víctima.
Ayer a la tarde los juegos estaban como si nada hubiera ocurrido en la plazoleta del barrio El Progreso. No quedó muy claro si habían sido acomodadas, y si los caños que sostienen el travesaño se encontraban bien asegurados en el piso.
Según dieron a conocer fuentes de la Justicia, la niña habría estado jugando en la plaza junto a otro niño, de dos años, con el que hasta ayer los investigadores no habían podido dar.
Uno de los aspectos que podrían ser peritados, es la verificación del modo en que la pesada estructura del juego estaba asentada en el piso.
Normalmente, estas hamacas yacen enterradas con cubiertas de concreto en sus apoyos, lo que permite la estabilidad del juego, de modo que no respresenten un peligro potencial para los niños que los usan.