El director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional, Nicolás Eyzaguirre, planteó hoy que Argentina no debe tener "vergüenza" de aceptar una misión del organismo para supervisar anualmente sus cuentas públicas y consideró que esa revisión "no implica una intromisión política".
El directivo consideró también que el país tiene "el deber" de compartir esa información con el resto de los Estados miembros de la institución y del G20. "Acercarse al Fondo no es para nada una vergüenza", destacó Eyzaguirre, según informó un cable de la agencia AFP, y distintos portales de internet.
En declaraciones a la prensa, en el marco de la Asamblea Anual del FMI y el Banco Mundial que se está realizando en Estambul, el ex ministro de Economía chileno negó que este tipo de supervisión sea "una auditoría" de la economía argentina.
"Lo que hace el FMI en todos los países es tener un intercambio sobre las políticas (económicas), pero no sobre cuestiones políticas, para que el resto de los países que integran el FMI sepan que hace cada uno. No es una auditoría, sino escuchar de primera mano las políticas que se están haciendo", fundamentó.
El directivo recordó que "China tiene un Artículo 4, así como Estados Unidos, Canadá o Chile". La revisión anual de las cuentas macroeconómicas y fiscales de los países miembros del FMI está contemplado en el artículo IV del estatuto del organismo, pero en Argentina no se concreta desde el 2006, tras haberse cancelado en un solo pago en efectivo la deuda que existía con la institución.
Eyzaguirre explicó que "el artículo 4 es una oportunidad para el país así como un deber para comunicarle al resto del mundo mediante el equipo del FMI lo que uno está haciendo y que políticas está contemplando".
DyN