Viernes 02 de Octubre de 2009 Edicion impresa pag. 48 > Contratapa
Michael Jackson estaba sano
La autopsia dice que su salud general era buena. Esto complica al médico que le inyectó propofol.

LOS ÁNGELES (AP).- Michael Jackson tenía los brazos cubiertos de pinchazos, el rostro y cuello de cicatrices y las cejas y labios tatuados. Pero no era el hombre esquelético y enfermizo que mostraban los diarios, según un reporte de la autopsia.

De hecho, el reporte del forense del condado de Los Ángeles muestra que Jackson era un hombre de 50 años bastante sano antes de morir por una sobredosis. Su peso de casi 62 kilos era aceptable para un hombre de 1,75 metros. Su corazón estaba fuerte, sin muestras de acumulación de placa. Y sus riñones y otros órganos principales lucían normales. Aun así, Jackson tenía algunos problemas de salud: artritis en la parte baja de la columna y algunos dedos, y una leve acumulación de placa en las arterias de sus piernas. Lo más serio eran sus pulmones, que el reporte dice estaban crónicamente inflamados y con una capacidad reducida que le habría ocasionado dificultades respiratorias. Sin embargo, según el documento, su condición pulmonar no era lo suficientemente seria como para haber contribuido con su deceso.

"Su salud general era buena´´, dijo el doctor Zeev Kain, presidente del departamento de anestesiología de la Universidad de California en Irvine, quien revisó una copia del reporte de la autopsia. "Los resultados están dentro de los límites normales´´.

Jackson murió en su mansión alquilada en Los Ángeles el 25 de junio luego que su médico personal, el doctor Conrad Murray, le administró el anestésico propofol y otros dos sedantes para ayudar al insomne crónico a dormir, dicen documentos de la corte. El propofol, un anestésico normalmente reservado a salas de operación, actúa como depresivo respiratorio y requiere constante seguimiento.

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