Otro presunto piloto de los "vuelos de la muerte" desde los que eran arrojados vivos a las aguas los prisioneros del ex centro clandestino de detención que funcionó en la ESMA durante la última dictadura militar, fue detenido y será indagado hoy por el juez federal Sergio Torres.

Fuentes allegadas a la investigación confirmaron a Télam que el ex capitán de la Armada Emir Sisul Hess fue detenido el martes último en Bariloche y conducido esta mañana, con importantes medidas de seguridad, a los tribunales de Comodoro Py 2002. La presencia de Sisul Hess en los tribunales de la zona de Retiro se dio a escasas horas que el juez Torres solicitase a España la extradición de Juan Alberto Poch, otro comandante de los "vuelos de la muerte" que había confesado a sus compañeros haber participado de esas macabras operaciones. 

La nueva detención se dio en el marco de la "megacausa ESMA" en la que el magistrado, con intervención del secretario Pablo Yadarola, investiga los delitos de lesa humanidad cometidos en ese instituto de formación naval durante la dictadura.

A Sissul Hess, nacido en Bahía Blanca hace 60 años, se lo responsabiliza por casi 900 casos y, si bien Torres mantiene un profundo hermetismo, trascendió que en un altillo del domicilio del represor la policía habría secuestrado "manuscritos con inscripciones relativas a los 'vuelos de la muerte'".

De acuerdo a constancias del expediente, el imputado habría confesado ante sus camaradas su participación en esas operaciones y se "ufanaba" de su actuación afirmando que los detenidos "no sufrían porque estaban dopados, iban cayendo como hormiguitas". El ex piloto naval, ex profesor de la ESMA, relataba "con orgullo" los hechos por los que se lo acusa, "hablaba con bronca y resentimiento; era un tipo íntimamente trastornado", sostuvieron algunos de los testigos que dejaron trascender que también frecuentaría en Bariloche movimientos neonazis.

Sisul Hess, aviador naval y paracaidista, habría formado parte entre 1976 y 1977 de la Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, y abandonó la actividad militar en 1991, con el grado de capitán de corbeta, para dedicarse a la actividad comercial. Estas actuaciones judiciales tuvieron un periplo por varios juzgados hasta que recayeron en el de Torres quien, tras una serie de medidas de prueba, verificó que había alrededor de 900 casos en los que el piloto aparecía imputado, por lo que ordenó la detención que se concretó en las últimas horas.

En este mismo expediente, el 22 de septiembre último el juez federal logró la detención de Poch cuando aterrizó en España piloteando un avión de la empresa "Transavía" para la que trabajaba desde la década del '80, cuando huyó de la Argentina rumbo a Holanda donde vivía desde entonces con su familia.

Al igual que Sisul Hess, su ex camarada de armas, también había confesado a sus compañeros de trabajo haber participado en esos vuelos y se ofendía cuando sus interlocutores aludían al "régimen 'criminal' de (el dictador Jorge Rafael) Videla", al que defendía por su lucha "contra los terroristas".

Télam