VIEDMA (AV).- La noche viedmense perdió un clásico esparcimiento, que no deja de provocar preocupación en una importante cantidad de parroquianos. Es que dejaron de funcionar los cabarets, al ser clausurados oficialmente por no cumplir con las medidas de seguridad dispuestas del municipio, y coincidentemente, el Concejo Deliberante estudia modificaciones para que puedan regularizar su situación.

De los cuatro locales que prestaban este tipo de servicio, tres incumplieron los requisitos sobre colocación de luces de emergencia, barrales antipánico, acondicionamiento acústico. Tampoco presentaron los planos del sistema eléctrico por lo que la comuna decidió colocarles la faja de cierre; confirmó a "Río Negro", el director de Seguridad e Higiene, Elio Bonaiuto.

Un tiempo atrás, ese área de control, había otorgado un plazo para realizaran los arreglos pero no acataron las sugerencias; indicó el funcionario. El cuarto local, directamente dejó de funcionar, y hasta ahora, los propietarios no dieron ningún tipo de explicaciones a las autoridades municipales.

Paralelamente, el cuerpo deliberativo viedmense analiza un proyecto del Ejecutivo municipal que pretende cambiar dos artículos de la ordenanza de esparcimiento nocturno. El planteo está relacionado con la intención de trasladar fuera del casco urbano a estos establecimientos cuando entre en vigencia la nueva norma.

El segundo recurso modificatorio tiende a evitar que los locales donde se reúnen los parroquianos a tomar copas, cuenten con apartados, que en la práctica se comunican mediante pasillos con el salón principal. Asimismo, en las manzanas donde funcionen estos lugares, no se permitirá el uso de inmuebles como hospedaje, habitación o residencia de personas que presten servicios de "alternadoras".