SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La obra de ensanche y repavimentación de la avenida Juan Manuel de Rosas todavía no está terminada y ya presenta roturas y ondulaciones, que la empresa ejecutora -Codistel SA- se comprometió a reparar antes de fin de año.

Pero lo que todavía están lejos de acordar la contratista y el municipio es quién correrá con el gasto de los trabajos, que podrían duplicar el presupuesto inicial.

El reacondicionamiento de la De Rosas entre el Centro Cívico y el monolito a San Martín es costeado con dinero del gobierno nacional y se transformó en el proyecto de obra pública más emblemático de la actual gestión, tanto por su visibilidad como por el alto volumen de tránsito que circula por el lugar.

Desde un inicio Codistel se quejó de los problemas que existían para preparar la base de la calzada, por filtraciones en la red de agua y cloacas. Sus técnicos también consideraron que lo mejor hubiera sido colocar hormigón y no pavimento flexible, porque la diferencia de costo no era mayor del 20%.

La obra total demandó una inversión de $ 1.200.000, de los cuales el municipio retuvo 470 mil como "fondo de reparo", hasta que los trabajos estén concluidos. El secretario municipal de Economía y Obras Públicas, Federico Lutz, dijo que la empresa realizó una propuesta y que el acuerdo para efectuar las reparaciones "desde el punto de vista del Estado está resuelto".

Pero el directivo de Codistel Wálter Luzzardi aclaró días atrás que "falta discutir todavía quién asume el costo". Una posibilidad latente es que el conflicto termine en la Justicia.

Lutz espera no llegar a ese desenlace y da por hecho que la empresa tiene la obligación de cumplir con el contrato. "Podemos flexibilizar los plazos y también podemos convocar a terceros como la empresa Arsa para resolver el problema de los caños de agua -explicó-, pero la contratista debe entregar la obra en óptimas condiciones y todavía no lo hizo". A las dificultades que plantea la negociación, se suma el apremio del tiempo. Porque está visto que los parches no son ninguna solución y el pavimento deberá ser removido por completo para recomponer el "paquete estructural" que va por debajo.

La época ideal para realizar esa tarea -por humedad y condiciones de suelo- será entre octubre y diciembre, explicó Lutz.

Para complicar las cosas aun más, Codistel es adjudicataria de otras obras de pavimento en distintos puntos de la ciudad, luego de ganar licitaciones en las que se presentó como única oferente.

Una versión que circuló ayer en los pasillos municipales daba cuenta de que la empresa había renunciado a los contratos para repavimentar las calles Onelli, Elordi y Diagonal Capraro.

Lutz dijo que hasta ahora Codistel no tiene ningún impedimento. aunque admitió que si no termina la J.M. de Rosas conforme al contrato podría recibir una calificación que la perjudique en futuras licitaciones.

Según lo informado, la empresa presentó una propuesta de remediación para la obra mal hecha y está a la espera de la respuesta técnica del municipio.