El gobierno de Brasil expresó hoy que "desconoce" el ultimátum del gobierno "ilegítimo" de Honduras, que ayer emplazó a Brasilia para que definiera el estatus con que alojó en su embajada en Tegucigalpa al derrocado presidente constitucional Manuel Zelaya.

Brasil "desconoce un supuesto ultimátum" o como se "le llame en la prensa", afirmó una fuente de la cancillería brasileña citada por la agencia noticiosa italiana ANSA. En un comunicado divulgado anoche, las autoridades de facto hondureñas fijaron un plazo de diez días para que Brasil defina en qué términos alojó a Zelaya en su embajada hondureña. La nota exige además que Brasil que "tome medidas inmediatas" para que Zelaya deje de utilizar la misión diplomática para instar a la "desobediencia civil". 

El texto agrega que una vez cumplidos esos 10 días, el régimen de facto podrá adoptar medidas sobre la situación de Zelaya, aunque no dio más precisiones al respecto. A juicio de la fuente consultada por ANSA, no hay nada que "declarar" sobre ese comunicado originado en un "gobierno ilegítimo" que desplazó del poder al presidente "constitucional" Zelaya. 

La fuente comentó que, tal "como ya fue dicho" por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, Brasil no ha establecido ningún "plazo" para que Zelaya abandone la representación brasileña, donde también se encuentran simpatizantes y colaboradores del gobernante depuesto.

En tanto, la legación diplomática brasileña continuaba hoy virtualmente "sitiada", según declaró Franciso Catunda, el responsable de negocios brasileño en Tegucigalpa. Catunda, que ayer abandonó el predio de la embajada, fue quien recibió el lunes a Zelaya luego de que el presidente Lula ordenara acogerlo.  Según publicó hoy el diario O Estado de Sao Paulo, el nuevo diplomático a cargo de la embajada brasileña, Lineu Pupo de Paula, pidió a Zelaya que evite "divulgar comunicados y declaraciones proselitistas mientras esté abrigado en la misión". 

Pupo de Paula dijo al periódico que también solicitó a los más de 60 acompañantes de Zelaya que eviten insultar a las tropas que rodean la legación brasileña.  El diplomático no desempeña funciones de embajador, dado que Brasil suspendió relaciones con Honduras desde el 28 de junio, día del golpe que desplazó a Zelaya, cuando decidió que el embajador Brian Michael Neele no regresara a Tegucigalpa.

No obstante ese supuesto pedido, Zelaya anunció anoche que mañana lunes lanzará la "ofensiva final" para recuperar el gobierno y llamó a sus seguidores de todo el país a que marchen sobre Tegucigalpa, según informó la agencia noticiosa alemana DPA.

Télam