CIPOLLETTI (AC).- Una importante respuesta tuvo la movilización organizada por la Interhospitalaria Provincial y poco más de 800 personas colmaron la plaza San Martín, marcharon por calles cipoleñas y participaron del acto de cierre, pasadas las 18:30, en el mismo paseo público.
Allí, uno de los cuatro negociadores de la Interhospitalaria, el doctor Carlos Lasri, anunció que hacía apenas unas horas el Ministerio de Salud le había confirmado para el lunes próximo la reunión que en principio se había articulado para el 2 de octubre, en Viedma.
El lunes -dijo Lasri- el secretario de la Función Pública, Carlos Oliva, escuchará la contrapropuesta a los 300 pesos como suma fija a todo el personal hospitalario que dispuso el gobierno. Se estaría aceptando, con algunos retoques, el 40 por ciento de aumento en las guardias y se reclamaría que la suma fija se estipule en 450 ó 500 pesos.
Fue muy aplaudido el representante de Salud de ATE-Neuquén, Baltazar Fuentes, quien instó a que neuquinos y rionegrinos unan esfuerzos para defender y afianzar el hospital público, evitando el "mercan- tilismo".
Con carteles y todo tipo de elementos de difusión expuesta se hicieron sentir las delegaciones de la mayoría de los hospitales rionegrinos, aunque fue notorio el número que aportó Bariloche, seguido de Cipolletti y Roca. Estaba el sindicato ATE con toda su conducción provincial y local, el centro de estudiantes de la Facultad de Medicina, el Frente Popular Darío Santillán, la JP Movimiento Evita -con bombos y redoblantes y banderas rojinegras- el Polo Obrero, la Corriente de Militantes por los Derechos Humanos, la Multisectorial de Cipolletti, docentes de Unter y vecinos de tomas locales. Voceros que hablaron al gentío se solidarizaron con los trabajadores despedidos de la planta Terrabusi de Buenos Aires.
En la cabecera de la marcha, con una inmensa bandera, iban los cuatro representantes negociadores de la Interhospitalaria -Lasri, Carlos Acosta, Fernando Melón y Miguel Coloni- y los dirigentes Oscar Contreras, José Chandía y Ramona, Ortiz, entre otros.
La médica Noemí Alemany, de la Corriente y asimismo de la comisión interna del hospital neuquino Castro Rendón, ponderó la lucha por la salud pública y fue la única que, en público, aunque sin nombrarlo, criticó a UPCN, porque denostó a los dirigentes "emparentados con el gobierno que negocian a espaldas de los trabajadores". Ana María Aguero leyó un muy extenso documento de los hospitales donde se reflejó el estado de stress y recarga de trabajo del personal y se planteó que en Río Negro "no hay plan de salud. Hay sí programas independientes y desarticulados unos de otros, sin coordinación ni coherencia".
"A la comunidad le decimos que el hospital no es de los trabajadores, es de todos. Es el lugar donde nuestros vecinos acuden a cuidar su salud, y a recuperarla. Debemos velar por el hospital público porque su deterioro nos afecta a todos. El derecho a la salud es un derecho de los pueblos y una obligación del Estado que debe garantizarlo en forma indelegable", se resaltó en el documento. Mientras, la retención se mantiene.