CIPOLLETTI (AC).- Una compañerita le hizo un comentario acerca de una película que había visto en la que una nena de 11 años fue violada y quedó embarazada. "A mí me pasa lo mismo", reaccionó la menor, con retraso madurativo, que señaló como autores del abuso a su abuelo, a su tío y a su padrastro.

Fue el puntapié de una investigación que ya arrojó una condena. En realidad, los abusos de su tío y abuelo habrían sido sólo manoseos cuando ella tenía unos 10 años y estaba en Neuquén, donde también se instruye una causa. El concubino de su madre, en cambio, la violó en reiteradas ocasiones durante un año desde que ella tenía 16, señala la acusación. Esto sucedió en su vivienda en Cipolletti.

La Cámara Primera del Crimen decidió condenar a 10 años de prisión al imputado, que ahora tiene 42 años, como autor del delito de "abuso sexual con acceso carnal en forma continuada agravado por haber sido cometido por el encargado de la guarda".

El juez Daniel Drake, el primero en votar, consideró "certeramente acreditado" que el imputado desde una fecha no determinada con exactitud, pero comprendida entre un año con anterioridad al 11 de julio de 2008 en la vivienda familiar, "accedió carnalmente vía vaginal en número indeterminado de ocasiones" a la menor, "valiéndose de amenazas y del ascendiente por existir una relación de convivencia entre él y la víctima, quien padece de retraso madurativo".

La adolescente declaró en cámara Gesell. Contó cómo eran las situaciones de abuso y aseguró que su padrastro le decía que si no se dejaba le iba "a pegar". Dijo que le daba "miedo".

En su defensa, el imputado había dicho que no sabía por qué la joven lo había denunciado. Afirmó que quizás era porque la tenía "cortita", controlándole horarios y demás.

Sin dudas

Pero Drake consideró que no existía ninguna razón para dudar de los dichos de la adolescente, que tenía 17 años cuando se radicó la denuncia. "Como se ha visto, la menor desde su discapacidad mental y estrechos recursos se encuentra impedida de llevar su intelección más allá de un pensamiento básico y limitado a la concretud", afirmó.

Los peritos que examinaron a la víctima coincidieron que sufre de un retraso mental ubicable entre los 9 y 10 años.

El fiscal de Cámara Ricardo Maggi había pedido la pena de 10 años de prisión, apartándose del mínimo porque "se trató de un delito continuado", dijo. La postura de Maggi fue compartida por la asesora de menores y cuestionada por la defensa del imputado, que en su alegato solicitó la absolución. La Cámara coincidió plenamente con la acusación.

Esta semana también se conoció un caso aberrante. Condenaron a un hombre por violar a su sobrina de 15 años con ayuda de su suegro, quien previamente la manoseó y luego sujetó. Este hecho ocurrió en Cinco Saltos en 2005. La Cámara Segunda dispuso una pena de ocho años de prisión para el acusado.