Domingo 20 de Septiembre de 2009 Edicion impresa pag. 10 > Regionales
Los préstamos "protegidos" por el IADEP
Destino y montos de "los créditos para las bodegas". Totalizan más de $ 427 millones.

Como ya se informó, el Instituto Autárquico de Desarrollo Productivo (IADEP), en el contrato de empleo precario que hace firmar a los empleados que incorpora, incluye una cláusula de "protección" de la información, que es una especie de blindaje contra cualquier intento de conocer cómo se manejan los préstamos del organismo, en particular aquellos que -cuestionados por la oposición- el ex gobernador Jorge Sobisch se ufanó de que los otorgaba él, más aún si eran para sus amigos.

La así llamada protección, que no es más que un eufemismo para disfrazar el secreto, nunca es del todo suficiente, porque siempre hay alguna grieta por donde la información sale. No toda ni completa pero, como se suele decir, algo es algo.

Algo es, por ejemplo, lo que figura en el gráfico titulado Anexo I, en el que aparece la refinanciación superior a los 427 millones de pesos otorgada en 2006 mediante el acuerdo del directorio (o Sobisch, ateniéndose a sus dichos) de fecha 2/3/06 número 230 y la resolución 015/06. Fueron beneficiarias las líneas crediticias denominadas "proyectos de inversión para la reconversión frutícola y proyectos de inversión para las industrias de transformación de los productos primarios obtenidos como resultado de la reconversión frutícola". Dicho en el lenguaje usual, fueron los créditos para las bodegas, y si repasamos la lista, varios fueron para amigos suyos; tanto más amigos cuanto mayor es el monto del préstamo.

A partir de enero de 2007, todas las bodegas comenzaron a pagar normalmente, con los intereses establecidos en el artículo 3 de la resolución 015/06. Esa norma dice que el préstamo generará intereses a una tasa fija nominal anual del cinco por ciento, que se computará desde el momento de la capitalización y hasta el quinto año. Pero desde el sexto año "la tasa será variable, equivalente al 35 por ciento de la tasa de interés nominal anual variable vencida en pesos de la cartera general del Banco de la Nación Argentina...". Ahí se presentaría un problema porque puede ser extremadamente dificultoso afrontar una tasa variable en medio de una crisis global que estrecha los mercados y reduce las ventas

 

Dueños conocidos

 

La Inversora, de Julio Viola, tiene un socio reciente, que es el grupo Eurnekián, y muy probablemente algún otro. Sociedad Patagónica SA, Andina Panamericana SA, Viñas del Chañar SRL y Establecimiento Patagónicos SA fueron originalmente chacras convertidas en empresas que proveen sus uvas a la Bodega del Fin del Mundo, de La Inversora.

La empresa María y Adelina SA pertenece a la familia Schroeder, que también tiene fuertes inversiones en empresas médicas.

Otra empresa del grupo es la SA Pincen, que presta servicios frigoríficos y de empaque con atmósfera controlada. Pincen recibió préstamos del IADEP por un total de 14.141.506,27 pesos, deuda que fue igualmente refinanciada por la resolución 015. Los préstamos fueron tres, cuya aprobación por el directorio consta en actas 233, 30l y 367.

La familia tiene pedidos de préstamos en trámite para su sociedad anónima Comunicaciones y Medios, propietaria de varios medios de comunicación. Además, obtuvo para la Fundación Médica de Río Negro y Neuquén, integrante del grupo, la venta de un predio en el Parque Industrial Neuquén, destinado a la construcción de un Centro de Investigación Aplicada, Desarrollo y Tratamiento Radiante.

Mediante el decreto 1164 de julio último el gobernador Jorge Sapag aprobó un convenio firmado por el presidente de la Fundación, Herman Schroeder, y el ministro de Desarrollo Territorial, Elso Bertoya.

El convenio entre "la provincia" y "la empresa" prevé la venta de un predio de 9.856 metros cuadrados a precio promocional y con sustento legal en la ley de promoción industrial 378/64.

La Fundación compromete una inversión, en dos años, de 5.697.293 millones de pesos.

 

Otros destinatarios

 

El establecimiento de Cofruva perteneció a Carlos Vidal, quien lo vendió (dicen que con alivio) al grupo chileno Universal Austral.

Muñoz de Toro Patagonia es del abogado Fernando Muñoz de Toro, quien compró viñas y bodega a una sociedad anónima Langber. La bodega era conocida en El Chañar como la "bodega de los ministros", pero se llamaba Arquén y el beneficiario del crédito fue un ex empleado de Hidronor, Carlos Lombardi, amigo o conocido del ex ministro de Sobisch y primo del gobernador Jorge Sapag, Alfredo Esteves. El establecimiento pasó a manos del comprador con la deuda que tenía, pero en 2007 habría recibido otro crédito.

AEG es de Adolfo Grittini, quien acompañó en la interna del MPN a Sobisch frente a la fórmula triunfadora, de Felipe Sapag. Rubén Patritti y Carlos Groppo, dueño de Delta Este, se hicieron amigos de Sobisch cuando eran ejecutivos de Repsol-YPF. Y Harvest es de Alfredo Pujante, secretario de Hacienda de Sobisch en la municipalidad de Neuquén y luego ministro de Hacienda, en el primer mandato de Sobisch como gobernador (1991-1995).

 

JORGE GADANO
jagadano@yahoo.com.ar

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