BRUSELAS.- La metáfora no puede ser más clara y elocuente. Los jefes de Estado y gobierno de la Unión Europea (UE) se pondrán de acuerdo durante el Consejo europeo extraordinario que se celebra en Bruselas en "pinchar la burbuja" de los bonos y las primas excesivas a los banqueros del globo.
La expresión del "pinchazo", más que gráfica, fue la que más se escuchó con fuerza ayer en la cumbre europea de Bruselas tiene "copyright" y autor bien definido.
Se trata del primer ministro sueco y -a la sazón- presidente de turno de la UE, Fredrik Reinfeldt, quien expresó su deseo de que -de manera progresiva- se acabe con la "cultura de los excesos bancarios" de la década pasada, considerada parte de la culpa del actual "tsunami" financiero mundial.
"Espero que podamos decir que la burbuja de los bonus ha pinchado. Los líderes europeos tienen que decir basta ya a la cultura de los bonos exagerados", remachó el sueco.
También el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, reelegido el miércoles en su cargo para otros cinco años, se mostró favorable a limitar los bonos.
"Se trata de un tema de ética. Nuestros contribuyentes están horrorizados con la idea de que su dinero se está usando para pagar bonus exagerados", aseguró el dirigente.
Los líderes de la UE desean que las economías más poderosas del planeta se comprometan a castigar con sanciones ejemplares a aquellas entidades bancarias que desembolsen primas exageradas a sus directivos.