MADRID (AFP).- El presidente boliviano y los empresarios españoles dieron cuenta de su sintonía después de las tensiones provocadas por la nacionalización de los hidrocarburos bolivianos en 2006, aunque ambos dejaron claras sus exigencias para invertir en el país.

El mandatario se entrevistó con su presidente, Antonio Brufau, quien le hizo "propuestas", según Morales, que no precisó cuáles.

"Queremos socios, no dueños de nuestros recursos naturales", matizó Morales, que avisó de que las compañías extranjeras deben "respetar las normas bolivianas" y no "conspirar contra el gobierno boliviano".

Por su parte, los empresarios con los que se reunió le pidieron que su gobierno "refuerce las señales de seguridad y confianza para las inversiones a largo plazo".