Entre el 28 de septiembre y el 2 de octubre la Municipalidad de Lago Puelo concretará un relevamiento poblacional para conocer la realidad estadística de habitantes.

“El último censo de población, realizado en 2001, no arrojó datos ciertos y en razón de que la localidad ha tenido un importantísimo crecimiento poblacional y edilicio, es imperioso que sepamos el estado real de población y encarar las proyecciones de trabajo”, justificó hoy el intendente Iván Fernndez.

En el operativo trabajarán 30 personas que serán capacitadas previamente por la Universidad Católica Argentina, con la participación de profesores y alumnos pertenecientes al “Programa de Investigación Geográfica Política Patagónica”.

Serán afectados voluntarios del Consejo Municipal de Discapacidad y agentes de la administración pública del Hospital Rural, Dirección General de Bosques y Parques, Defensa Civil del Chubut, Brigada del Plan Provincial de Manejo del Fuego, Plan Nacional de Manejo del Fuego, Parque Nacional Lago Puelo, Instituto Superior  de Formación Docente 803 y personal de la Municipalidad de Lago Puelo.

Datos extraoficiales difundidos por el gobierno chubutense revelaron hace un par de meses que esta localidad cordillerana es la que más ha crecido en el contexto provincial, con casi un 230 % en los ltimos 7 años, aunque ahora habrá que chequear en terreno dicha información.

La tierra, tema gravísimo

Hoy finalmente se firmó un acuerdo entre los ocupantes de las tierras destinadas a un proyecto del Promeba y el municipio de El Bolsón, y que apunta una solución concreta a una cuestión candente en la sociedad.

El predio, destinado a albergar a unas 200 familias carenciadas que deben emigrar de los barrios ribereños, apareció ocupado justo cuando debían comenzar las obras de infraestructura básica del plan, adjudicadas a la empresa Codistel con una inversión superior a los 10 millones de pesos.

El intendente Oscar Romera había ordenado el desalojo, avalado por algunos concejales, mientras que otros pidieron una mediación a la Casa de la Justicia.

Tras una semana de negociaciones, el abogado Marcelo Muscillo –el funcionario designado-, anunció el final del conflicto con medidas paliativas como la reserva de otro espacio en el acceso norte y la posibilidad de inscripción a la tierra pública para los ocupantes.

Asimismo, en el marco del acuerdo, rescató valores como “el derecho a la tierra; la legalidad del reclamo y la igualdad ante la ley. La convivencia y la paz social estuvieron amenazadas”, estimó.

“El tema de la tierra en El Bolsón es gravsimo y nos está reventando por todos los costados”, se sinceró ante la problemática manifiesta con unas 15 tomas irregulares en los últimos dos años y en distintos puntos del ejido municipal.

Policías culpables

Los jueces de la justicia chubutense encontraron hoy culpables a cuatro policías de El Maitén acusados de “vejaciones calificadas y falsedad ideológica” en el marco de una denuncia formulada por tres vecinos que fueron detenidos y golpeados en el interior de un bar.

Entre los uniformados imputados, Juan Sandro Montecino, José Luis Morales, Gustavo Daniel Llancaman y Franco Simón Cárcamo fueron declarados autores responsables de los delitos descriptos y agravados por el uso de violencia física y amenazas. Montecino fue encontrado culpable también del delito de falsedad ideológica, en tanto que José Omar Pailacura resultó absuelto, tal como lo había solicitado la fiscalía.

Ahora, la Oficina Judicial deberá fijar fecha para el juicio sobre la pena a aplicar.

El extenso fallo fue dado a conocer esta tarde en los Tribunales de Esquel, aunque sin la presencia de los imputados que estuvieron representados por sus abogados defensores. Los magistrados, Jorge Criado, Anabel Rodríguez y Ricardo Rolón, votaron unánimemente de acuerdo al pedido realizado en su alegato por el fiscal Martín Zacchino.

En su fallo, entendieron que “se logró probar la acusación y que no se acreditaron las circunstancias narradas por los policías imputados”.

Tanto en el acta labrada al momento de su intervención y en la comunicación telefónica con el fiscal de turno la madrugada del hecho, como en su declaración en el juicio en su contra, los uniformados sostuvieron que las víctimas, entonces sospechosos (y ms tarde condenados por otro hecho de violencia), habían opuesto resistencia y debieron ser reducidos.

Según esas versiones, “uno de los detenidos se había caído sobre el ripio y eso es lo que le había lesionado el rostro. Sin embargo, esta versión no respondía a las explicaciones que los profesionales médicos y el forense propusieron para esas lesiones. Tampoco se correspondió con los dichos de los numerosos testigos”.

Fernando César Bonansea

fernandobonansea@yahoo.com.ar