El fiscal general ante la Cámara Federal, Germán Moldes, estableció los alcances del reciente fallo de la Corte que despenaliza la tenencia de drogas para consumo personal al oponerse a la clausura de una causa contra el músico Andrés Calamaro, denunciado por "haberse fumado un ‘porrito' ante los asistentes a la presentación de un libro”.

Para Moldes sólo queda "fuera de la jurisdicción criminal” el consumo de marihuana "sin trascendencia a terceros” en tanto no está comprendido "otro comportamiento más amplio o referido a otras sustancias y en otras circunstancias espacio-temporales diferentes”.

En un dictamen de seis carillas, al que Télam tuvo acceso, Moldes también planteó la necesidad de "políticas activas de educación y prevención de adicciones"; de "campañas efectivas de esclarecimiento de los efectos dañinos del uso de sustancias estupefacientes”, de "programas reales de asistencia y ayuda de las personas drogodependientes”, entre otras cuestiones.

El fiscal general reclamó, además, el "especial direccionamiento de todas esas acciones hacia los jóvenes y los sectores más vulnerables y desprotegidos de la población” e hizo suyos "los recientes pronunciamientos de los sacerdotes católicos que trabajan en las villas de emergencia de la zona metropolitana”.

La causa se inició por denuncia de un particular quien refirió que "el pasado 26 de agosto en el Club Social y Deportivo Estrella de Maldonado, en un acto público convocado para la presentación de un libro, Andrés Calamaro fumó un cigarrillo de marihuana frente a los asistentes y ese expediente recayó ante el juez federal Norberto Oyarbide.

El magistrado pidió su dictamen al fiscal Eduardo Taiano quien propició el cierre de la investigación ante lo cual Oyarbide remitió el expediente "en consulta” a Moldes, en su carácter de fiscal de Cámara, quien dispuso el apartamiento de colega de primera instancia y designó al fiscal Federico Delgado para que prosiga la investigación.

El fiscal general afirmó que "cegar ‘ab initio' (de antemano) toda posibilidad de indagación basándonos en el reciente pronunciamiento del Supremo Tribunal constituiría, en mi modo de ver, un grave error: el de considerar, desde ahora y para el futuro, la decisión de la Corte como un vasto o ilimitado permiso para el consumo de estupefacientes en cualquier circunstancia y lugar”.

No obstante, Moldes ponderó el fallo de la Corte al sostener que es "significativo y oportuno sin lugar a dudas” y que él se encuentre entre quienes "lo esperábamos ayer y lo celebramos hoy” ya que el Máximo Tribunal "bajó el telón sobre lo que quedaba en pie de un absurdo lógico” como era considerar que el consumo persona era impune pero la tenencia con esos fines estaba castigada.

Télam