NEUQUÉN (AN).- Si los concejales lo avalan, en pocas semanas más sentarse en un taxi capitalino costará casi 3,50 pesos. Esa cifra se desprende de la propuesta que el Ejecutivo municipal presentó ayer ante el Concejo Deliberante, y que en forma acordada con los taxistas y choferes, arroja la necesidad de subir los relojes un 10,35%.
Ayer el planteo fue aplaudido por taxistas y peones del servicio para quienes el porcentaje arrancado al Ejecutivo, que hace sólo dos semanas había planteado que el aumento sólo debía ser del 4,56%. Sin embargo ya desató el rechazo de otro sector: la Asociación de Remiseros, quienes ayer se hicieron presentes en el Deliberante para frenar la suba automática que representaría para su servicio el aumento de los taxis.
Esto es así ya que por ordenanza el servicio de remises debe ser un 20% más costoso que el de taxis, situación que en la realidad no sucede. El subsecretario de Servicios Concesionados del municipio, Gustavo Benko, aseguró que "si damos el aumento a los taxis y no a los remises, estos últimos serían más económicos", y mientras indicó que "junto a esta suba a los taxis debe aplicarse un aumento tarifario de casi el 17% a los remises", desde la Asociación Oscar Flores adelantó su oposición al indicar que "si nos suben la tarifa nos vamos a quedar sin pasajeros porque la situación no está para aumentar los precios".
Con el conflicto entablado con este sector de los remiseros, dado que la Cámara del sector avala la medida, el sindicato de Peones de Taxis, la Unión y la Asociación de Propietarios de Taxis mostraron ayer su conformidad con el incremento planteado, que el diciembre volverá a analizarse.
"La propuesta fue acordada porque los taxistas planteaban una necesidad del 25% y nosotros del 4,56%, y por eso por ejemplo llegamos a un acuerdo en tomar como cálculo los valores al 31 de agosto y no al 1 de junio como habíamos hecho nosotros", indicó Benko. En detalle la propuesta plantea elevar a 3,37 la bajada de bandera que actualmente cuesta 3,05 pesos, subir 2 centavos y llevar a 24 centavos el costo de la ficha por cada cien metros recorridos y subir importantemente el valor del minuto de espera elevándolo a 70 centavos, cuando actualmente cuesta 50 centavos.
En comparación con la tarifa que entró en vigencia en enero de 2008 la bajada de bandera costará un 47% más, la ficha cada 100 metros se encarecerá un 45% y la ficha por minuto de espera se disparará un 324%, ya que entonces costaba sólo 16 centavos.