SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El fiscal de Cámara Carlos López pidió que le impongan seis meses de prisión al acusado por un robo calificado, porque el hecho quedó en grado de tentativa y porque después de escuchar los testimonios entendió que no había utilizado armas. Para su pareja y compañera en la ocasión, el fiscal pidió la absolución, porque no consideró probada su participación en el hecho.
El fiscal de instrucción Eduardo Fernández les había atribuido a Wálter Añual y a Sandra de los Ángeles Quintero, ambos de 26 años, que a las 19:40 del 3 de julio de 2008 se presentaron con fines de robo en el comercio de ropa deportiva ubicado en Mitre 252 de Bariloche. Según su acusación, Quintero comenzó a retirar remeras, sacos y pantalones de los exhibidores y los colocó en el interior de una bolsa y una mochila, con intención de sustraerlos.
En esos momentos -según Fernández- la encargada del comercio advirtió la maniobra, cerró la puerta del local con llave y le pidió a otros empleados que convocaran a la Policía, pero Añual se habría abalanzado sobre la mujer con intenciones de golpearla y así logró salir del comercio. Un empleado persiguió a Añual por algunos metros, pero según la acusación fiscal, el imputado regresó sobre sus pasos y lo intimidó con un cortaplumas que tenía una hoja de 7 centímetros, con el fin de que dejaran salir a Quintero del local.
Durante el forcejeo, Añual golpeó al empleado con el puño, pero en esos momentos llegó una agente de policía que lo redujo, secuestró el arma blanca y retuvo a los sospechosos hasta que llegaron refuerzos.
La causa quedó encuadrada como "robo con armas en grado de tentativa" para Añual y como "hurto en grado de tentativa" para Quintero, quienes aguardaron el juicio en libertad pese a que ambos cuentan con dos condenas por delitos contra la propiedad.
La que permitió que el fiscal redujera la calificación a "robo simple" fue la agente que intervino para detenerlo, porque declaró que el cortaplumas "lo tenía Añual en el bolsillo" y lo entregó voluntariamente.
