JUNÍN DE LOS ANDES (ASM).- Esta ciudad parece hacer de los cortes de ruta una triste costumbre en lo que va del año, con más de una decena. Ayer, miembros de una cooperativa de trabajo realizaban bloqueos parciales de la 234, a la altura del puente sobre el río Chimehuín, en demanda del inmediato pago de tareas realizadas y obras comprometidas por el gobierno provincial para reactivar el empleo.
Unas 70 personas se apostaron desde las 8.30 sobre el estratégico puente, que impide todo paso por caminos alternativos. Se trata de miembros de la Cooperativa Obrera de Trabajo y Consumo Junín Limitada, pero a ella se sumaron adjudicatarios de las 101 viviendas, que también muestran su incertidumbre por el destino de ese plan, a la luz de los cambios dispuestos por el gobierno en el área, que los dejaron "sin interlocutores".
Hasta el cierre de este despacho, la modalidad escogida era la del llamado "permiquete", que consiste en interrumpir el paso por espacio de unas dos a tres horas, para luego levantar el bloqueo por unos 15 minutos hasta volver a cortar. Por esa razón y si bien hubo muestras de fastidio y bronca entre las automovilistas, no se produjeron las largas colas ocurridas en ocasiones anteriores, en ese mismo punto.
Semanas atrás, los desocupados cortaron la ruta durante tres jornadas, en demanda de subsidios y reactivación de la obra pública.
La cooperativa de trabajo reúne a personas que dos años atrás también intervinieron en cortes de ruta. Venían desempeñándose en labores rurales por contratos. Por caso, realizaban tareas de forestación, pero días atrás recibieron la noticia de que no se les renovaría el vínculo.
Sin embargo, el núcleo del conflicto en esta ocasión es que "no hay noticias" de las obras comprometidas por el gobernador Jorge Sapag en oportunidad del aniversario de Junín de los Andes, en febrero pasado, y que consistían en el gimnasio del barrio Lanín, las refacciones en el viejo hospital y el Vía Christi.
"El gobernador nos prometió que esas obras se pondrían en marcha para dar trabajo a la gente, pero hasta ahora no hay ni una noticia y ya hemos esperado demasiado", dijo a este diario Gustavo Guajardo, uno de los voceros del piquete.
Puntualizó que se mantendrán "en la ruta cuanto sea necesario, porque estamos defendiendo a nuestras familias y no hacemos otra cosa que reclamar lo que se nos ha comprometido desde el poder político".
Al cierre de este despacho, la medida continuaba con la amenaza de intensificar la protesta hasta llegar a un corte total, de no obtener respuestas.
